Poemas.

Empezamos jugando a un amor, que no era real y tu y yo lo sabíamos.

Empezamos creyendo esa pequeña historia que solo era juego de nuestras mentes, hasta que un día sin querer y con varios testigos nos besamos con pasión.

¿Recuerdas esos bellos momentos?

Eso es lo que hoy somos, unos inocentes niños creando la historia de amor que una vez imaginamos jugando.

Aquí estamos a poco de cumplir un año, ¿un año de que? de caminar juntos el sendero más bello que podría alguien haber creado para mi, a un año de besos, pasiones, de viajes, de aventuras, de risas y llantos. Un año en que hubieron cambios favorables para los dos, un año de regalos inmensos para mi corazón.

Tal vez todavía no te he dado mucho de lo que verdaderamente te mereces.

Pero te doy lo que soy y lo que te amo, te doy lo que era y lo que tu hiciste de mi, no por que halla cambiado, si no que reconocí los errores que de mi te hacían mal, para hoy seguir a tu lado.

En ese lugar donde me siento mujer, y sobre todo viva.

En donde creo sueños juntos para el resto de nuestros días, en donde aparecen hijos ya con nombre y apellido, un hogar, y la lucha diaria para que esta historia nunca termine.

Y ese es mi objetivo, es la meta a donde quiero llegar, en construir un mundo soñado para vos, en donde el mal sea solo unos segundos, que mañana no recuerdes, un mundo en donde tu y yo seamos protagonistas, un mundo en donde todo lo que nos rodee, esas sonrisas que una vez, jugando a una historia de amor, nos unieron.

Esos es lo que deseo para vos, y construyo en mí.

Amor... Los sueños de nuestra vida están a punto de llegar, no dejemos que ellos marchen, no dejemos que no vuelvan jamás.

Que el corazón no se pase de moda. Y que cada luna, sea luna de miel.

Quien nunca podrá dejarte de amar...

Primero que nada quiero darte las gracias por haberme brindado tu amistad y confianza.

Bien sabes que todos tenemos hambre. Hambre de pan, hambre de conocimiento, hambre de amistad,

Hambre de amor pero sobre todo un amor verdadero e incondicional.

Aunque el amor leal, sincero y desinteresado es la verdadera comunión de las almas; suele ser celoso, egoísta y vulnerable. Por lo que hay que hacerlo perdurar y fortalecerse a través del tiempo, la distancia, pero sobre todo a través de los éxitos y fracasos que vivamos juntos.

Creo que el sentimiento que siento por ti, es el más noble. Crece del desinterés, se nutre dándose, y florece con la comprensión y con la fidelidad.

El

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