QUE ES EL ASPAN?
mickybun1010Práctica o problema2 de Octubre de 2012
10.217 Palabras (41 Páginas)1.142 Visitas
¿QUE ES EL ASPAN?
Es una organización llamada Alianza para la Seguridad y la Prosperidad de América del Norte (ASPAN), esta organización fue creada en Waco, Texas el 23 de marzo de 2005, por acuerdo de los dirigentes de Canadá, Estados Unidos y México, en Waco, Texas. Los propósitos y temas que pretende esta organización se mantiene en secreto desde marzo de 2005 y que alcanzará su clímax en la reunión programada para agosto de 2007, con la participación del presidente George W. Bush, el primer ministro Stephen Harper y el presidente Felipe Calderón.
El Acuerdo para la Seguridad y la Prosperidad de América del Norte (ASPAN) nació con los objetivos de mejorar la seguridad regional a través de nuevos mecanismos de coordinación entre los tres países del TLCAN, de formar un bloque regional para competir en el mercado global, sobre todo contra China, y de armonizar reglamentos, estándares y normas entre los tres socios comerciales norteamericanos.
Éstos fueron, al menos, los objetivos declarados públicamente. En realidad se trata de profundizar un modelo de integración subordinada de acuerdo tanto a los intereses de Estados Unidos como país, como a los de las grandes empresas transnacionales que allí tienen el control del poder estatal.
Con el ASPAN, estas empresas se han apoderado explícita e institucionalmente del proceso de integración subordinada, es decir, en donde México y Canadá están subordinados a los intereses de EEUU. En esta etapa, el proceso avanza lanzando acuerdos que tienen impactos de largo plazo sin participación alguna de los Congresos. Incluso en el caso del Consejo de Competitividad de América del Norte, formado en el marco del ASPAN, ni siquiera cuentan con la participación de representantes de los gobiernos y son las grandes empresas que llegan a los acuerdos, mientras que los gobiernos sólo funcionan como ejecutores y facilitadores de los designios del sector privado.
OBJETIVOS Y CARACTERISTICAS DEL ASPAN
Si no queda duda de que la agenda del ASPAN viene exclusivamente del gobierno de los Estados Unidos, vale la pena analizar cuidadosamente esta agenda y sus objetivos. EEUU tiene tres áreas de objetivos estratégicos en el ASPAN, que están interrelacionados en su totalidad: la globalización del capital para la competitividad, el acceso a recursos, y la seguridad regional bajo sus propias definiciones.
OBJETIVO 1
Más allá de las medidas y propuestas específicas que están incluidas en el ASPAN bajo el rubro del la competitividad, el problema principal es que la lógica parte de una gran mentira: que México, Canadá y Estados Unidos comparten intereses económicos como bloque regional vis a vis otros bloques en el mundo.
La regla de oro para la integración económica global en esta era de gran movilidad de capital es ir a donde se puede sacar mayores ganancias. Frente a esta situación, las empresas no tienen ninguna lealtad regional por el hecho de formar parte de TLCAN. A pesar de ser sus principales socios comerciales, sus estrategias globales cada vez se enfocan más en China y en otros países asiáticos, tanto para la producción como para los nuevos mercados.
Desde esta perspectiva, cuando se habla de mejorar la competitividad del bloque norteamericano, en realidad se está hablando de crear mejores condiciones de ganancia para la parte de su negocio global que las empresas trasnacionales tienen bajo el TLCAN. Obviamente, ésto no hace más competitivo a México como país. Las empresas trasnacionales no tienen país. Si sea Cemex o Cargill, el objetivo es crear mejores condiciones para la ganancia y si éso se hace en China, van a China; si se pueden mejorar las oportunidades de ganancia bajo el TLCAN para sus negocios en la región, también les interesa pero no porque tienen una identidad regional sino simplemente porque obtener mayores ganancias es su razón de ser.
En este contexto, la estandarización de los reglamentos y normas es una manera de imponer la normatividad de EEUU, de ampliar los privilegios que gozan las empresas e inversionistas en la región, de eliminar las salvaguardas de los otros dos países, y de evitar que ellos actúen con criterios propios. Medidas que se contemplan en el ASPAN—como mayor protección de propiedad intelectual y acciones conjuntas contra la piratería—son prioridades de EEUU, ya que México tiene pocos productos patentados en el mercado en comparación a EEUU y una gran parte de la fuerza laboral vive de la piratería que también beneficia a consumidores de bajos recursos. Otras reglas también reflejan la imposición de intereses de EEUU.
El discurso de "tres grandes naciones unidas en una causa común", compitiendo como bloque con el resto del mundo, es un discurso tramposo para ocultar el poder hegemónico de EEUU y la manera en que los intereses de México y Canadá están subordinados a la agenda del superpoder que los separa geográficamente.
OBJETIVO 2
El documento del Consejo para la Competitividad empieza el capítulo sobre energía poniendo las cartas sobre la mesa en este tema: "La prosperidad de los Estados Unidos depende altamente del abasto seguro de energía importada." En el Tratado de Libre Comercio EU-Canadá, los negociadores estadounidenses impusieron una regla de "proporcionalidad" que dice que el país tiene que vender su petróleo al precio interno al insaciable mercado estadunidense y que tiene que mantener la misma proporción de exportación a EEUU, aún en casos de desbasto. México no firmó esta cláusula, y su sector petrolero está en manos del estado. Ésto es un gran problema para EEUU. En primer lugar, porque las oportunidades para sus empresas de lucrar con el petróleo mexicano son limitadas por ley. Segundo porque con el petróleo mexicano bajo el control del sector público, el Estado podría tomar decisiones sobre el uso del recurso a favor del bien común de su pueblo y no de EEUU o de las grandes empresas petroleras, tales como bajar los niveles de exportación, entre otros.
Por éso casi todos los estudios asociados al proceso de ASPAN concluyen con recomendaciones para ir hacia la privatización de PEMEX. El estudio coordinado por la organización norteamericana Council on Foreign Relations en 2005 llamó a la urgente necesidad, según ellos, de reformar el sector petrolero de México, citando la baja productividad de PEMEX y la falta de desarrollo en el sector.
El Consejo para la Competitividad de ASPAN, por su parte, concluye en la necesidad de hacer un análisis de puntos de referencia, o indicadores, sobre la producción de petróleo en México para el año 2008, debido a lo que llaman "las faltas en rendimiento y operación de Pemex". El análisis, que no contempla medir posibles ventajas de tener un sector estratégico bajo control del estado, claramente busca preparar el terreno para la privatización con un estudio supuestamente desinteresado que condena PEMEX. Así, con el fin de declarar a PEMEX técnicamente incapacitado, funciona de la misma manera en que los gobiernos mexicanos neoliberales han buscado descapitalizar a PEMEX para mostrar una falta de viabilidad. Mientras tanto, el Consejo recomienda acciones para desprender sub-sectores de la paraestatal, incluyendo la separación del sector "gas no-asociado" en una empresa aparte (y no estatal) llamado GASMEX.
OBJETIVO 3
Desde el inicio del ASPAN es notable el contenido de seguridad que le ha dado el gobierno de Estados Unidos, y es notable porque el TLC, en el sentido estricto, no contempla esta parte de la integración. Sin embargo, EEUU siempre ha vinculado de alguna manera su política económica de los TLC con asuntos de seguridad, y mucho más desde el 11 de septiembre y la era de la doctrina de seguridad nacional de Bush.
Los TLC siempre tienen un impacto en la agenda de seguridad de los países que firman con EEUU. La dependencia económica lleva consigo la consecuencia de reducir los márgenes de soberanía nacional, y hace más fácil que EEUU dicte las políticas de seguridad para los países que están bajo su hegemonía económica y financiera. Ésto ha sido el caso del TLCAN. Poco a poco, México se ha distanciado de su propia tradición diplomática de neutralidad, a favor de una agenda de apoyo a la política exterior bélica de EEUU.
EL ASPAN hace explícita la relación entre el acuerdo comercial y los asuntos de seguridad, bajo el pretexto de la integración. Los acuerdos del ASPAN exigen la modernización de las fuerzas militares y policiales de México, compra de equipo de EEUU (siempre buscando ampliar sus mercados de armas y equipo militar), y capacitación impartida por agencias de EEUU.
Un ejemplo de este tipo de acciones es que en marzo de este año se anunció la participación de la DEA (agencia antidrogas estadounidense) y el FBI en un programa para capacitar a elementos del ejército, a la Agencia Federal de Investigación y a la Policía Federal Preventiva mexicanos. Se dice que el objetivo es la homogenización de planes estratégicos para combatir el tráfico de drogas en los tres niveles de gobierno. La ironía es que EEUU tiene una larga historia de fracasos en esta materia, empezando con el hecho de que sigue siendo el mercado más grande del mundo para las drogas ilegales.
Otros planes que están viendo en el ASPAN son la militarización de la frontera sur de México, trasladar hacia el interior del país instalaciones de aduanas e inmigración (posiblemente con la participación de agentes estadounidenses), mecanismos de identificación biométrica en el programa "Smart Border", etc.
Más allá de la dudosa efectividad
...