SIDA LA DUDA

“Un error no se convierte en verdad por el hecho de que todo el mundo crea en él (Gandhi)”

Desde niña crecí con la idea de que existe una enfermedad mortal y terrible y aunque no tenía conciencia que era lo que la producía, si podía ver en la televisión de la época imágenes crueles en África de muertes masivas y además de eso, una fuerte discriminación hacia los homosexuales, evidenciado en su confinamiento y rechazo en centros especializados a causa de esta enfermedad que en mi entendimiento infantil era vista como una plaga o epidemia.

En el año 1993 comenzando la adolescencia, en el colegio, vimos la película Filadelfia, protagonizada por uno de mis actores favoritos Ton Hans, quien para la época era un apuesto joven, cosa que no se veía muy bien en la película pues al personificar un enfermo de SIDA lejos estaba de mostrarse como ese gran galán de cine, pero esa cinta es de las que uno podría decir lo marcan a uno, dados los ímpetus altruistas adolescentes y al tener “Filadelfia” un alto contenido por el respeto de los Derechos Humanos que deja de lado cualquier cuestionamiento científico sobre este síndrome o enfermedad. Puede decirse que más bien el contexto histórico a través de los años ha sido una reivindicación de Derechos de las personas que padecen el Virus, la no discriminación de los homosexuales y la lucha en los estrados judiciales por esta causa y en ningún momento se ha dado el debato por negar la existencia científica de esta enfermedad.

En el trasegar de los años se ha visto el gran despliegue publicitario para la prevención del VIH-SIDA, campañas incluso de fundaciones que se dedican solo a este tema, solo al tratamiento, y solo a acoger personas que no tienen recursos para costear los medicamentos que hacen más llevadera la vida de estas personas.

Lo que puede indicarnos que efectivamente en los medios de comunicación nunca se ha dado un debate científico al respecto y que además nunca se ha cuestionado la veracidad del descubrimiento de esta enfermedad, anunciado a principios de los años 80.

Es muy Importante en este sentido hablar de la historia del descubrimiento el VIH SIDA, pues al ver los documentales La Duda y La Casa de los Números que tratan el tema, se atiende a una mirada que nos muestra la otra cara de la moneda, el lado oscuro de la comunidad científica, y podemos ir vislumbrando así una verdad que tal vez el mundo ha venido negándose desde entonces.

A partir de este análisis pueden surgir entonces algunas preguntas: ¿Es posible que VIH no sea la causa del SIDA? ¿Es posible que la inmensa mayoría de los servicios públicos de salud, facultades de medicina, centros médicos, organizaciones y publicaciones científicas, e incluso la Organización Mundial de la Salud, lleven años aceptando y difundiendo una "versión oficial" que no está respaldada por ninguna evidencia científica? ¿Es posible que el VIH, el virus asesino que millones de personas hayan creído tener en la sangre, ni siquiera exista? ¿Es posible que los que defienden la "versión disidente", entre los cuales hay al menos 2 Premios Nobel, hayan sido sistemáticamente censurados por casi la totalidad de los medios de comunicación del mundo? ¿Es posible que millones de personas hayan muerto por una enfermedad falsa? ¿Es posible que el SIDA sea el negocio más perverso de las últimas décadas, o tal vez de la historia?

Antes de ver los documentales yo me hubiese atrevido a decir que NO, y no imaginaria que ninguna perversidad gire en torno a lo económico en este tema específico, considerando además la buena imagen de la comunidad científica internacional y dando por sentado que aquellos que investigan y se les otorga un gran presupuesto para este fin, además de ser altamente competentes estudiosos y conocedores de los métodos científicos, pues no carecen de ética al respecto dado que lo que está en juego es la salud y la dignidad humana de los habitantes del mundo entero.

Si antes de ver los documentales uno fuese más allá y pensara de manera un tanto perversa, tal vez se podría pensar que las multinacionales farmacéuticas estarían interesadas en este negocio, pero no con la complicidad de las serias Facultades de medicina de los países más desarrollados del mundo, ni de la comunidad científica en general, o los médicos independientes que no obtendrían ningún beneficio.

Sin embargo luego deber estos documentales e indagar sobre la llamada “versión disidente” sobre el VIH, se siente uno sumergido en una total ignorancia, además siente de nuevo la implacable influencia de los medios de comunicación, de nuevo aquel concepto de “La Formación de la mentalidad sumisa” de la que nos habla Vicente Romano en su libro; y es que tiene mucho sentido pues si el VIH-Sida surgió en los 80s apenas cuando yo era un Bebe, han tenido tiempo de hacer los suyo con esta generación que no ha tenido tiempo de cuestionar en lo más mínimo, ni ver el trasfondo del tal hallazgo, ni mucho menos mirarlo distinto a lo que nos muestra la película Filadelfia, es decir, no es ya cuestionar lo que se medicamente se ha dicho, es reivindicar los derechos de los que han padecido la enfermedad y han sido discriminados, y trabajar en la prevención de la misma.

Dada la ignorancia que existe al respecto uno se dice a uno mismo: pues bien yo soy estudiante de Derecho y mi temas son las leyes, en eso me he enfocado los últimos años, pero tengo amigos que se dedican a la medicina, y yendo más allá han existido muchas generaciones graduadas de médicos a partir del hallazgo de la enfermedad, y pues no he visto reparo alguno respecto del tema lo que quiere decir que o tragan entero con esta verdad a medias, o que por cualquier otro motivo no existe un interés en dar este debate.

Es increíble como a pesar de que hace más de 10 años navegamos en la web, nunca por lo menos yo, había escuchado de esta versión disidente acerca del VIH SIDA, en los documentales se muestra como las personas en diferentes países ni siquiera tienen claridad sobre que es una cosa u otra (VIH-SIDA), confieso que hasta yo ver este documental descubrí que tampoco lo tenía claro y al conversar un poco el tema en mi entorno familiar y de amigos, el resultado es el mismo, nadie a los cuales les pregunté conocían este tema, y todos manejan conceptos diferentes que poco se acercan a la realidad.

Es triste ver cómo nos encontramos sumergidos en la ignorancia, y como tragamos entero con todo lo que nos dicen los medios, nunca hemos pensado como tal manipulación ha desgraciado la vida de millones de personas en el mundo, me entristece ver como lo ha hecho específicamente en África, el Continente donde están los países más pobres del mundo, y tal vez, que esto se dé allí no

...