Zoques

Día de muerto para los Zoques

Anima ojye ore omo’tzampapä koroya’

Los Zoques u Ore Pät, el día de muertos es una celebración llena de vida y de agradecimientos a la madre tierra. No sólo porque antes de la imposición católica por estas mismas fechas las culturas mesoamericanas hacían festejos para celebrar los frutos que había dado el fin del ciclo agrícola, la presencia del maíz y frijol, flores y frutas en los hogares de los pueblos originarios zoques, sino también porque esta celebración tenía que compartirse con quienes habían sido cimiento y raíz de la reproducción humana, con aquellas personas que estaban alimentando la tierra con sus cuerpos ya difuntos y viajando en alma entre los mundos e inframundos. Para los Zoques antiguos, el culto a sus muertos no terminaba en el sepulcro, para ellos es la continuación del ciclo cósmico. Dentro de la tradición zoque existen rituales especiales para las almas que están de visita, para ello se preparan con tiempo para recibirlos con gran alegría. En pocos lugares hoy en la actualidad se puede vivir o sentir esos colores violentos, agrios y puros, danzas, ceremonias, trajes insólitos que solo los ancianos o chamanes pueden usar y las inagotables velas que son la luz de los ya difuntos.

Para los pueblos originarios Zoques de Chiapas, los días 1 y 2 de noviembre son sin duda una fiesta muy especial, donde la alegría converge con los olores de las flores, el copal y los múltiples sabores de dulce de calabaza, yuca, papaya, camote, entre otros. Cada año los zoques de Chiapas se vierten en los cementerios cargados de alegría, de flores, comida, bebida y otros enseres para decirles a sus seres queridos que están en “Tsu’an, I’ps täjk o Pagujk tsuy” , cuantos los siguen recordando.

Por eso (aún sin saberlo) todo altar de muertos que preserve este sentido de comunión con sus seres cercanos y queridos, es un ofrecimiento de vida, de vínculo estrecho con la tierra y su abundancia. Esta tradición data de culturas prehispánicas en todo Mesoamérica, que con la conquista de los españoles y la evangelización se fusionaron, por lo que resulto un sincretismo cultural.

En la creencia zoque también existen niveles del inframundo que están ampliamente relacionados con el día de muertos ya que estos son los portales que permiten el acenso y descenso de las almas, las cuevas, cerros y volcanes juegan un papel muy importante para los zoques ya que son estas donde también se hacen ofrendas y rituales para las almas que regresan a visitar a sus familiares.

Es así como los ya difuntos o muertos pasan a un primer nivel del inframundo llamado tus’an. Tsu’an

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