Abogacía por dinero ?

 ¿ Ejerceremos la abogacía por dinero

¿ A que obedece el discurso racional

La abogacía no puede ser ejercida con fines materiales, sino con fines humanos, es verdaderamente un abogado aquel sujeto que posee valores, principios, sabiduría y rectitud para asumir y entender la posición del necesitado involucrado o afectado.

No será, moralmente valido realizar las actuaciones profesionales  tendientes únicamente a un beneficio económico patrimonial, sino que con estas se ha de buscar la tranquilidad interna, aquella que solo florece cuando se ha actuado de manera coherente, racional y consiente de la posición del sujeto que pide la colaboración.

No se puede generar una plena satisfacción,  al realizar una labor que no tiende a beneficiar al sujeto o la comunidad, sino que propende  generar beneficios personales, sin esforzarme en mis labores profesionales, detrimiendo al implicado y a mi profesión como abogado.

En esta profesión tan humana, pienso que lo que se debe buscar es beneficiar a la comunidad y al individuo, creándose para sí y para su entorno un concepto positivo,  y un beneficio conmutativo; pues al realizar de manera correcta mis labores e de obtener un beneficio que representara el esfuerzo invertido para lograr el cometido de ayudar a la sociedad .

Pero para lograr este cometido se ha debe tener una educación , que imparta preceptos en los que predomine la satisfacción moral que solo se ah de generar con una actuación  lineal , sobre el beneficio material ; en los que se resalten las actuaciones éticas y morales y se reprochen las acciones realizadas de manera imperativamente interesadas.  

El discurso racional, es vital para lograr una comunicación integral para evitar iniciar conflictos que se han generar por la imprudencia y la ignorancia, entonces , es un puente de comunicación principal que ha de remplazar el actuar de manera impulsiva a un actuar adecuado y racional al momento y el lugar , pues se sobreentiende de este que implica una racionalización y sistematización de los pensamientos los cuales han tenido un proceso de adecuamiento al contexto social .

Un discurso racional práctico es un procedimiento utilizado para probar y fundamentar enunciados normativos y valorativos por medio de argumentos.

El Derecho puede entenderse como argumentación, pues desde cualquier perspectiva la actividad de todo jurista cuando aplica el Derecho consiste fundamentalmente en argumentar. La destreza para presentar buenos argumentos define a un buen jurista de aquel que no lo es.

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