CONCEPTO DE CIUDADANÍA Y SUS MODELOS

CONCEPTO DE CIUDADANÍA Y SUS MODELOS.

El concepto de ciudadanía concierne con la época moderna, su origen se concretó en la Grecia clásica hace aproximadamente unos 2500 años y por mucho tiempo su idea se ha ido ampliando y ha progresado hasta en un punto en el cual se puede mencionar a una “ciudadanía universal” que transciende todos los limites. Sin embargo, para entender la importancia de dicho concepto es importante tener en cuenta según Aristóteles, que el hombre es un ser social que debe vivir en un ámbito comunitario, lo cual se refiere a que la convivencia ciudadana permite que la persona llegue a ser ella misma y desarrolle sus condiciones innatas de alguien que siente, razona y planifica.

Por otro lado, en esta condición se impone y se justifica ciertas normas de conducta que hacen posible una convivencia organizada y pacífica en una sociedad. Por esta razón, se habla de una democracia, que es un modelo que aprecia la participación de los ciudadanos y está en continua transformación. Así mismo, para mantenerla es necesario que el ser humano como ciudadano sea capaz de hacer uso de sus libertades y reflexionar que ella es una construcción cultural y no algo relacionado a una base genética.

Ahora bien, una parte primordial de la ciudadanía es también conocer su historia para evidenciar su evolución a través de los años. Para ello, se habla de su lugar de origen que fue Grecia; en dicho territorio aparecieron grandes aportes a la humanidad en los cuales se destacan democracia y la filosofía. Sin embargo, en materia política nos ha dejado dos modelos de ciudadanía los cuales se denominan ateniense y espartano.

En el Modelo Ateniense, se tienen características que se relacionan con el desarrollo del demos (pueblo) y de la participación ciudadana. Anteriormente, se mostraba que su sistema o régimen no era autoritario debido a que, los gobernantes debían escuchar frecuentemente a los ciudadanos. En efecto, se podía afirmar que el este modelo proveía la autonomía de cada individuo y a la vez recordaba la importancia de esta para el funcionamiento de la comunidad, en él no se diferenciaba el estado y la ciudadanía. Así pues, para dar una mejor explicación sobre este modelo es necesario distribuirlo en diferentes épocas.

La primera de ellas fue la época de Solón, que para ese entonces la forma de gobierno pasó de ser aristocrático a timocrático. Para esta etapa, se crearon las reformas de Clistenes que impusieron un régimen mixto donde la aristocracia se asociaba con el pueblo, al cual se lo otorgaban algunos derechos. De hecho, se dice que es un régimen justo debido a que las clases bajas tenían la posibilidad de controlar el funcionamiento del proceso a pesar de que los cargos importantes lo ocuparan personas de las clases más altas. Una característica particular de esta forma de gobierno, es la ley del ostracismo que consistía en desterrar cada año a un hombre de la polis en un periodo de diez años, y se aplicaba en personas con cargos políticos, todo esto con el fin de evitar abusos que pudieran arruinar la democracia.

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