Colombia SOS

Colombia SOS.

Colombia en estos momentos se encuentra en una crisis civil debido a las protestas. Las recientes reformas anunciadas hicieron que una turba enardecida alzara su voz a nivel nacional. El litigio soberano-estatal comienza y se ven ya las consecuencias de esto. Dichosos los que después de protestas llegan indemnes a su hogar. Los medios de comunicación tergiversan la realidad que ocurre en estos momentos en Colombia erigiendo aún más el odio pueblerino. Es increíble ver a los dirigentes haciendo de las suyas mientras el pueblo y las autoridades juegan al gato y al ratón, algunos gatos muriendo, algunos ratones también. Es tácito admitir quien es el ventrílocuo político de todo esto, la injusticia palmaria no se puede negar…

Lo oneroso de esta situación aún no llega y esperemos llegue el sosiego pronto. El pueblo no necesita aquiescencia para luchar por sus derechos, para combatir por lo que quiere, para no dejarse pisar de políticos mentirosos disfrazados en bona fide. ¿Esta problemática no es algo a todos nos atañe? ¿Es para el Estado algo minucioso? Pensábamos que las guerras civiles eran algo añejas; pero por lo visto, bienvenidos al siglo XX una vez más. De facto es culpa siempre de la minoría que quieren ser los dueños de Colombia.

El pueblo lucha con ahínco. El pábulo que el Estado ofrece a la soberanía es la mentira. La marcha al parecer parece ser vitalicia a una solución, aceptar que este problema es inteligible debería hacernos despertar y fomentar más la unión. La apología por los dos bandos actuales es notable, unos echando culpas a otros y es que esta misma desunión es la que nos mantiene en guerras idealistas y hasta civiles (como se aprecian estos últimos días) actualmente. ¿Esta por acaecer el Frente Nacional 2.0? Pero… esta vez con la diferencia de si elegir un integrante antiguo del M-19 o un antiguo líder con nexos con el narcotráfico. Si supieran el cringe que dan los medios de comunicación al digredir la verdadera causa de la protesta, no harían lo que hacen, aunque, claro, no es un secreto para nadie que estos mismos son títeres también de los jeques colombianos, de los suntuosos líderes. ¿Es el actual presidente de Colombia un déspota despiadado?

Queda demostrado una vez más que la cortapisa que mantiene a Colombia en pobreza son sus malos dirigentes. Los disturbios se prorrogan si la problemática se mantiene, los tumultos continúan ¡ni dios podrá salvarnos de lo inminente!

Acres de líderes tenemos y si no alzamos la voz a tiempo tomarán poderío del país. ¿Hasta cuándo tendremos que aguantar la concupiscencia de estos balurdos líderes?

Ánimos Colombia, la berraquera es tu cariz.

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