Desarrollo humano y globalización

Desarrollo humano y globalización

La globalización es el resultado de la evolución y hegemonía del capitalismo, un tema que ha permeado en todos los ámbitos que nos rodean actualmente (política, economía, sociedad, trabajo, religión, etc.) y lo ha hecho desde hace ya un buen tiempo, pues es desde el siglo pasado, después de la guerra, que esta toma fuerza y se comienza a imponer en nuestra sociedad, surgiendo como respuesta a la búsqueda de desarrollo y progreso del hombre, impulsada principalmente por los países industrializados y el neoliberalismo; una época donde lo que se quería era alcanzar el estado de bienestar; y son los hechos históricos y las realidades de aquel entonces las que llevaron a los países a cimentar su estructura socio- político-económica en este modelo capitalista y mercantilista el cual por un tiempo pareció ser la tan anhelada respuesta donde hubo crecimiento, aumento de la productividad y disminución de la pobreza. Estamos en la era del fundamento mercado-céntrico promovido por la globalización y envueltos en un sistema financiero internacional privatizado cuyo problema mas grande es que carece de gobernabilidad y tiene gran inestabilidad, llevando a la concentración del poder y desigualdad en la sociedad. A partir de esta visión es que el desarrollo se empieza a medir por la regla de la globalización y esta a su vez es medida en términos del capitalismo, lo que nos puede llevar a decir que actualmente el desarrollo se ve con ojos del capitalismo y de ahí no se sale, pues como lo plantea el texto de Osvaldo Sunkel, esta ideología tiene un discurso único, dominante y triunfalista que la hace ver como la dirección inefable y correcta.

Y claro, la globalización ha permitido grandes avances, especialmente en el desarrollo tecnológico y científico, ha permitido también un nuevo desarrollo cultural, o mejor dicho pseudocultural, a través de los medios masivos de comunicación, la cultura también sea transnacionalizado así como la economía, permitiendo nuevas expresiones de lo que es el ser humano, pero al mismo tiempo ha desvirtuado y desmantelado el progreso de la identidad cultural propia de cada sociedad, y aun mas grave ha provisto a los ciudadanos marginados de expectativas que chocan con la realidad, generando inconformismo y conductas antisistema. Esta desigualdad también la plasma en cifras el texto de Sunkel, donde nos encontramos que según la OCDE 15 % de la población ostenta el 80% de las riquezas, mientras que al otro 85% de personas nos tocan las sobras y mirar como sobrevivimos. Porque como dice pepe Mujica en su discurso “hemos creado una civilización hija del mercado y la competencia, y lo que empezó como una economía de mercado se convirtió en una sociedad de mercado” y ya no somos nosotros los que dirigimos la globalización sino esta a nosotros, y esta economía basada en la competencia no permite la equidad.

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