Dilemas Eticos

VIRGILIA TORRES CARDENAS

DILEMAS ETICOS EN NUESTROS TIEMPOS

La ética ha venido siendo estudiada, aunque incipientemente, desde los años 450-400 A.C. cuando después de la muerte de Sócrates, Aristóteles le da a las ciencias un objeto moral, en este sentido son muchos los filósofos e investigadores que han venido escribiendo y generando conocimiento a cerca de ella. Teniendo en cuenta que el hombre desde el principio de su existencia misma, tal como lo establece el dogmatismo cristiano, trata el tema del bien y el mal (caso de la manzana del paraíso), y que desde siempre se ha escrito sobre las actuaciones inmersas en valores y principios. Puede afirmarse que desde los primeros tiempos, el hombre ha venido de la mano de la ética, afrontando dilemas entre lo “bueno” y lo “malo”, lo “correcto” y lo “incorrecto”.

En este orden de ideas, los diferentes enfoques doctrinarios de la ética le han venido estampando huellas, que han ido formando y cambiando concepciones de la manera como se observa el mundo, y como se actúa frente a situaciones que se presentan en el diario vivir y en el desempeño de profesiones y roles. De lo anterior, se desprende que muchos de los problemas de esta ciencia, están basados justamente en sus diferentes concepciones, por ejemplo, cuando se dice que el hombre es un ser moral (Sócrates), su filosofía se dirige hacia la investigación de la esencia de las virtudes éticas, su pensamiento se interesa por la formación del ciudadano, afirma que el hombre sabio es al mismo tiempo un hombre virtuoso1. Estas concepciones, obviamente forman a un ser humano integral con valores y principios, que ante un dilema, actuaría de manera diferente a quien aplica la doctrina del existencialismo, por ejemplo.

Es así como los filósofos han venido contribuyendo a la formación de un mundo ideal. No obstante, a su lado también ha venido a través del tiempo, lo que algunos le llaman, la anti filosofía2, por ejemplo, “el fin justifica los medios” el pensamiento de Maquiavelo, que innegablemente también ha dejado huella y ha llevado a actuaciones anti éticas a lo largo de la historia de la humanidad. Todo esto al lado de las diferencias raciales, las injusticias, la compra de materia prima a bajo costo a los países subdesarrollados, la suprema riqueza de uno países y la extrema pobreza de otros, ha hecho que se vayan generando dilemas en el actuar del ser humano, que se vayan generando esquemas bajo los cuales se actúa y se piensa.

El hombre entonces, como individuo pensante que actúa con base en paradigmas, “una constelación de conceptos, valores, percepciones y prácticas compartidos por una comunidad, que conforman una particular visión de la realidad que a su vez, es la base del modo en que dicha comunidad se organiza” (Capra,98) estamos en este momento viviendo una crisis con el cambio de paradigma en que nos encontramos, donde de la visión mecanicista-reducionsita, se está traspasando en muchos campos y profesiones a una visión ecológica “la percepción desde la ecología profunda reconoce la interdependencia fundamental entre todos los fenómenos y el hecho de que, como individuos y como sociedades, estamos todos inmersos en ( y finalmente dependientes) de procesos cíclicos de la naturaleza” (Capra, 98).

Dado lo anterior, enfrentamos entonces una crisis de valores y comportamientos, debido a que con el reduccionismo, se hablaba del hombre como “maquina” y se veía este separado de su entorno e independiente de él, promoviéndose valores como la competición, la expansión, la cantidad y la dominación (en la naturaleza ha sido extremadamente notorio). En este sentido, “el predominio de la razón científico técnica que se convierte peligrosamente en la única base de la sociedad obviando los valores morales” (Álvarez, 2012), ha contribuido a formar la sociedad

que tenemos hoy, basada en inequidad, injusticia y con dilemas éticos en muchos campos.

En las diferentes profesiones se observan esos dilemas, Un dilema ético se da cuando se presenta alguna situación como una elección disyuntiva, en que existen dos o más soluciones, todas ellas factibles y defendibles. Siendo las soluciones posibles, y encontrando desde la moral un bien en ellas, se genera entonces, un conflicto en el individuo ante la toma de alguna decisión, dando pie a una serie de discusiones y cuestionamientos éticos y morales. No se está seguro de lo que corresponde hacer, y tampoco es claro separar lo correcto de lo incorrecto. Un caso muy notorio se está dando con la globalización de la información y ésta a través de las redes sociales, la Internet, televisión por cable, entre otras, la cual ha cobrado mucha fuerza en los últimos tiempos.

En este sentido muchos comunicadores enfrentan diariamente dilemas éticos, la definición simplista de periodismo como dar y trasmitir información, heredada de la visión reduccionista del mundo (Descartes), ha logrado que en muchos casos personas que se dedican a esta actividad, olviden factores importantes del periodismo. Este como tal, debe tener unas características de veracidad, imparcialidad, y debe tener como base la investigación, “así mismo se dice que los medios de comunicación son libres y a la vez tienen responsabilidad social. Lo anterior tiene un fundamento ético, ya que al hablar de dar y recibir información a través de medios de comunicación es hablar del otro, de un colectivo de una sociedad entera y la ética aparece en cuanto existe ese otro, ese colectivo, esa sociedad entera” (Sarasvati, 2005).

El periodista se ve enfrentado a dilemas éticos, entre decir la verdad o arriesgar su vida, en el caso de hacer investigaciones sobre personas relacionadas con temas delicados y altamente comprometedores, esto se ha dado con periodistas que han sido amenazados en Colombia y han tenido que salir del país; dilemas

entre engañar para obtener

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