Efectos Sociales del Consumo

Introducción:

El consumo, es un proceso económico que depende primordialmente del contexto sociocultural en el que se desarrolle. Por ello, los procesos económicos de la llamada “globalización” hacen que cada rincón del mundo, que sin importar si este es el más remoto, no parezca tan indiferente ante los procesos de consumo.

Por lo que este tema busca medir los alcances de los consumidores en un contexto social poco favorable.

El autor Néstor García Canclini nos dice que:

“El consumo se liga, de otro modo, con la insatisfacción que engendra el flujo errático de los significados. Comprar objetos, colgárselos en el cuerpo o distribuirlos por la casa, asignarles un lugar en un orden, atribuirles funciones en la comunicación con los otros, son los recursos para pensar el propio cuerpo, el inestable orden social y las interacciones inciertas con los demás. Consumir es hacer más inteligible un mundo donde lo sólido se evapora. Por eso, además de ser útiles para expandir el mercado y reproducir la fuerza de trabajo, para distinguirnos de los demás y comunicarnos con ellos, como afirman Douglas e Isherwood, "las mercancías sirven para pensar". (El consumo sirve para pensar, pág. 5, Punto 6)  

Este fragmento, me da paso responder que los objetos que consumimos, sin duda nos poseen, todo de acuerdo a nuestros fines, ya que estos objetos son parte de la identidad individual que incluso pueden abarcar una clasificación social.

¿Cómo es que el consumo juega un papel primordial en la sociedad?

El consumidor puede subdividirse en diversos tipos, puede poseer un gran respaldo económico o simplemente hacer lo mejor que pueda para conseguir el objeto de necesidad. Si hablamos de hábitos de consumo, por nombrar un ejemplo: la vestimenta, esta no solo abarca un rasgo de necesidad, sino que también abarca un rasgo cultural del individuo.

Por ejemplificar los efectos del consumo nos centraremos en un escenario, el cual es Freetown, la capital de Republica de Sierra Leona, este país para entrar en contexto:

“Se vio marcada por una guerra civil, que trajo consigo altos niveles de violencia y desplazamientos, además de que en años recientes se vio azotado por un brote epidémico de Ébola entre 2014 – 2015, y en pleno 2018 sufre de una crisis alimentaria.” (Periódico la Vanguardia, Roma, 19 mar).

¿Pero qué tiene de especial esta región del mundo? Bueno, en Freetown la realidad se evade con la vestimenta, sus ciudadanos son capaces de sacrifica necesidades básicas con tal de reunir dinero para obtener zapatos que hagan juego con sus prendas y es que esta clase de consumo concede un estatus social que no solo se queda en simples halagos, sino que convierten al individuo en alguien respetable y de ejemplo.

Este caso en particular nos deja ver que los hábitos de consumo no se detienen por muy marginado que sea un país, siempre existirán aspiraciones que rebasen una difícil realidad.

Según Canclini: “El consumo como lugar de diferenciación y distinción entre las clases y los grupos, ha llevado a reparar en los aspectos simbólicos y estéticos de la racionalidad consumidora” (El consumo sirve para pensar, Hacia una teoría multidisciplinaria, pág. 3)

La población de Freetown, sin duda busca una fuga a su realidad paralela, por ello, aunque la economía no tenga algún motor de fuerza busca una alternativa, en este caso la trasformación del individuo.

Conclusión:

Pienso que nos podemos sentir reflejados en esta situación de pertenencia, en este caso la situación del consumo es la que en ocasiones nos representa simbólicamente

Referencias:

“El consumo sirve para pensar” Néstor García Canclini. Consumidores y ciudadanos, Conflictos multiculturales de la globalización. México. Grijalbo. 1995. Pág. 41, 55.

Homo Videns: La sociedad teledirigida. Sartori, Giovanni: Homo videns: La sociedad teledirigida, ed. Santillana-Taurus, Madrid 1998. Pág.12

Modelos teóricos del consumo cultural:

...