Evolución histórica de la vivienda clasica

Evolución histórica de la vivienda clásica

A partir de la observación de cuatro viviendas clásicas, si bien pertenecen a di-ferentes épocas, podemos ver que están desarrolladas en una o dos plantas, el ingreso da a un patio central y éste se encuentra rodeado por diferentes habitaciones.

A destacar de la vivienda griega, en general las habitaciones eran reducidas y no respondían a un uso específico. Había un gran salón, baño y habitaciones. En la época helenística se destaca el uso de una habitación grande solo para los hombres (andrón) y una habitación en el piso superior o al fondo de la casa, solo para mujeres (gineceo). Se cocinaba al aire libre con braseros para evitar la concentración de humo, la decoración la realizaban con mosaicos y tapizados y carecía de ventanas o las pocas que se encontraban, estaban a gran altura y sin cristal. En el patio central tenían un pozo del cual, las mujeres, recogían agua.

En la vivienda romana, el patio central era llamado atrio, tenía un altar para los dioses familiares, una pequeña piscina donde se recogía el agua de lluvia y era donde se desarrollaba el centro social. Las habitaciones principales eran la sala de recepción y el comedor y una habitación conyugal. Las viviendas llamadas “domus” contaban con habitaciones que funcionaban como locales comerciales. Por influencia griega, los romanos agregaron a su casa, un patio trasero con jardín que estaba ro-deado de columnas.

Las viviendas islámicas, también organizadas a un patio central, contaban con dos plantas. En la inferior todas las habitaciones llamadas de servicio (comedor, coci-na, almacén) y en la superior, las habitaciones. Había muy pocas ventanas para pre-servar la privacidad de la familia. En la decoración predominaban las figuras geomé-tricas. El patio era llamado Sahn y tenía uso religioso, estaba rodeado por arcadas y poseía en el centro una fuente de agua simétrica que era usada como baño y con fines estéticos.

La vivienda salteña del siglo XVIII, además de tener el patio central, tenían forma de chorizo (eran casas largas). Había un patio principal rodeado de las depen-dencias de servicio (cocina, comedor) y un patio trasero grande, ambos unidos por un pasillo. Las habitaciones se encontraban en la planta superior o a lo largo del pasillo.

A modo de reflexión final, luego de las lecturas recomendadas y la búsqueda en otras fuentes de historia, las diferencias que se presentan en cada vivienda responden en primer lugar, a la importancia que se le daba a la vivienda en cada época. En Gre-cia, la vida central de las personas no estaba en la casa, sino en el Ágora. En Roma sucedió algo similar, pero se le empezó a dar algo más de importancia a la vivienda y eso se ve reflejado en los ambientes para usos específicos, los muebles funcionales. En cambio en la vivienda islámica, responde a un tema

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