La tecnología como sustituto del trabajo.

“La tecnología sus beneficios y riesgos”

Estamos viviendo una nueva era donde la tecnología ocupa un papel primordial, mediante el uso de ésta nuestra vida se ha visto simplificada, la tecnología nos permite mantenernos conectados unos a otros sin importar el lugar donde nos encontremos, nos facilita tareas restándole tiempo y trabajo, en resumen, nos permite cumplir con más tareas simultáneamente y así como nos genera beneficios nos trae consecuencias, consecuencias que a largo plazo pueden resultar devastadoras. Esta nueva era nos ha traído una nueva forma de contemplar el mundo, las relaciones interpersonales, la política y como no, la economía. A fines de la edad media emergió la revolución industrial. En esa época la economía estaba basada en el intercambio de bienes y servicios en un mercado, sin embargo esto está cambiando de forma vertiginosa, el comercio se está dando ahora en el Internet.

La propiedad ha perdido su valor. El objetivo de ahora es divertirnos, conocer y satisfacer necesidades del momento, no se desea poseer por largos períodos de tiempo, se desea recibir un servicio que entretenga a corto plazo. Las compras están limitadas a un solo clic, o a un solo “touch”. Este tipo de compras on-line nos lleva a una nueva era, la era del “acceso”, en esta nueva era todo se ve simplificado a la búsqueda incansable del entretenimiento que nos puede brindar el acceso a nueva información, en pocas palabras, la compra de la cultura. Se ve el nacimiento de una nueva división social, entre aquellos que pueden acceder a esta nueva era y quienes no.

Las labores realizadas por el hombre se han visto paulatinamente sustituidas por máquinas, creadas por el mismo hombre para simplificar las tareas, causando problemáticas sociales tales como el desempleo. Las interrelaciones humanas también se ven afectadas, es cada vez menos frecuente encontrar una familia que coma unida, que se comuniquen activamente, sin la necesidad de verse forzados al uso de un teléfono como medio de comunicación. El ser humano cada vez va perdiendo su capacidad para la comunicación activa con los demás, cada vez más se va materializando y deshumanizando. Los niños y adolescentes se crían viendo este sistema, sabiendo como se maneja y tomándolo como algo “normal”. La familia, los amigos, las personas que queremos, son algunos términos que van cada vez más perdiendo su significando, se ve cambiado, tergiversado, se ven integrados de una forma jamás antes vista.

Mediante el uso del Internet podemos conocer gente nueva, gente con otros orígenes, costumbres, pensamientos, ideas y con el solo apretar unas cuantas teclas, los jóvenes de nuestra generación se han formado con la idea de que no hay límites, que nada los puede detener. La información está a nuestro alcance pero, ¿acaso no es peligroso? Se encuentran por doquier sectas y grupos creados on-line con el propósito de debatir temas de ocio, de interés universal, de ateísmo, de preferencias sexuales, etc. Es común encontrar adolescentes con problemas de personalidades múltiples o con problemas de identidad porque a esa edad cualquier puede hacerlos sentir identificados, y es a esa edad crucial donde su mente y personalidad se ve forjada, que se ven atados a una tecnología que ahora se les antoja imprescindible.

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