ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

MAGNICIDIO O VIOLENCIA ECONOMICA


Enviado por   •  15 de Abril de 2014  •  1.603 Palabras (7 Páginas)  •  330 Visitas

Página 1 de 7

MAGNICIDIO O VIOLENCIA ECONOMICA

Se considera magnicidio al asesinato u homicidio de una persona importante, usualmente una figura política o un dirigente religioso, donde se busca abrir campo a un nuevo pensamiento independientemente del gravamen del delito. En general, exige que se produzca la muerte de una o más personas determinadas en función de su cargo y se reúnan los tipos de asesinato u homicidio en la comisión del delito. Durante mucho tiempo ha sido una de las figuras más castigadas y penadas en los diferentes estados a lo largo de la historia penal. Sea este el momento para preguntarnos el porque de los magnicidios, y que hace se comentan estos actos de violencia que tanto daño hacen a la sociedad.

A través de la historia hemos podido analizar y evidenciar el ataque que se ha presentado sobre el sector político, uno de los mas afectados con esta figura, ya que muchos representantes de la vida política en su afán de cambiar los rumbos de la sociedad y prestar un mejor servicio a la comunidad, han sido asesinados de una forma cruel y despiadada, como ejemplo y centrándonos en nuestro país tenemos el asesinato de los candidatos presidenciales Jorge Eliécer Gaitán y Luis Carlos Galán o el del político y periodista Álvaro Gómez Hurtado entre otros.

Por los tiempos del magnicidio contra Galán, por esta misma vía, se trataba de arrasar a la dirigencia agrarista en el norte de país, y se liquidaba a sangre y fuego la mayoría de los movimientos campesinos, además también aniquilaba la capacidad organizativa de importantes sindicatos, forma efectiva que impedía la irrupción de nuevas fuerza políticas en el escenario nacional. Se acallaba a periodistas valerosos como Guillermo Cano, Jorge Enrique Pulido y Jaime Garzón, éstos no se acobardaron ante el riesgo que suponía para su vida el hecho de asumir frontalmente la denuncia de la amenaza, que representaba para la sociedad colombiana la aceptación del narcotráfico como estilo de vida.

El magnicidio también era usado para frenar a los funcionarios del gobierno, como Rodrigo Lara Bonilla, que osaban enfrentar con eficacia la capacidad corruptiva de los mafiosos. El magnicidio ha sido el dispositivo utilizado por las fuerzas más mezquinas de las diferentes organizaciones, ya sean del estado o fuerzas insurgentes, para acrisolar el aparato judicial y policial de sus efectivos más valerosos y decididos en la lucha contra el crimen.

Las víctimas del magnicidio en Colombia se cuentan entre todos los estratos sociales, provienen de todas las orillas ideológicas, pero son más numerosas en los sectores que se oponen al statu quo o a sus aliados. Entre tantos se podrían mencionar los nombres de Jaime Pardo Leal, Bernardo Jaramillo Ossa, Carlos Pizarro, Valdemar Franklin Quintero, Carlos Mauro Hoyos, José Antequera, Enrique Low Murtra, Darío Londoño Cardona, el Gobernador Roldan Betancourt y el dirigente conservador Álvaro Gómez Hurtado.

A lo largo de la historia del país vemos como la falta de acción del estado para buscar castigar y juzgar a los diferentes actores intelectuales de los magnicidios, ha dado lugar a que esta estrategia se convierta en uno de los instrumentos más utilizados y populares para neutralizar el progreso de las fuerzas políticas y sociales que representan una amenaza eventual para los intereses de los sectores más notables de la sociedad colombiana.

La indolencia del estado para enfrentar este fenómeno nacional la resume bien el asesinato de Jorge Eliecer Gaitán y el bogotazo. Donde El 7 de febrero de 1948 Gaitán encabeza una manifestación a la que acuden más de 100 mil personas, esta Marcha del Silencio ocurre en protesta por los hechos de violencia política en diversas partes del país. En su famosa Oración por la Paz Gaitán le dice a Ospina Pérez: "... Señor Presidente: Os pedimos cosa sencilla para la cual están de más los discursos. Os pedimos que cese la persecución de las autoridades y así os lo pide esta inmensa muchedumbre. Os pedimos pequeña y grande cosa: que las luchas políticas se desarrollen por cauces de constitucionalidad. Os pedimos que no creáis que nuestra tranquilidad, esta impresionante tranquilidad, es cobardía. Nosotros, señor Presidente, no somos cobardes: somos descendientes de los bravos que aniquilaron las tiranías en este suelo sagrado. Pero somos capaces, señor Presidente, de sacrificar nuestras vidas para salvar la tranquilidad y la paz y la libertad de Colombia...."

La figura del magnicidio ha sido históricamente la más penada en los diferentes Estados excepto en Colombia; pero aun así con la dureza que se ha condenado este fenómeno, aun no se logra erradicar del presente; mientras nazcan ideologías encontradas y reine el poder del que mas tiene y del que mas puede pagar, siempre existirá la disputa

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (9.6 Kb)  
Leer 6 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com