OFFE, Claus. Capitulo VII, Partidos políticos y nuevos movimientos sociales. Editorial Sistema, Madrid, 1988

OFFE, Claus. Capitulo VII, Partidos políticos y nuevos movimientos sociales. Editorial Sistema, Madrid, 1988

BREVE REFERENCIA BIBLIOGRÁFICA DEL AUTOR:

Claus Offe, nace en Berlín en 1940. Estudió filosofía, economía y sociología en la Universidades de Colonia y Libre de Berlín, doctorándose en sociología (1968). Su orientación académica general es el marxismo de la Escuela crítica, de la cual es considerado uno de los grandes representantes de la segunda generación. Aunque no es seguidor de visiones funcionalistas obtiene del aporte del sociólogo alemán Niklas Luhmann (funcionalista heredero de Parsons) la parte de la teoría sistémica, con la que divide la sociedad como una estructura formada por sistemas y subsistemas. Becario en los Estados Unidos en las Universidades de California en Berkeley y Harvard (1969-1971). Fue colaborador de Jürgen Habermas en el Instituto de Investigación Social de Francfort. Politólogo con gran proyección internacional, es profesor de sociología en el Instituto de Sociología Política de la Universidad Humboldt de Berlín. Ha desempeñado docencia en numerosas universidades europeas y americanas: Francfort, Constanza, Viena, Bremen, Princeton, Bielefield, Boston, Harvard y Berkeley. Miembro, junto con Habermas, de la segunda generación de la Escuela de Francfort y su teoría crítica.

Offe ha abordado las cuestiones claves que permiten interpretar la realidad del mundo actual, como son las crisis del Estado del bienestar y de la representación en la democracia, la aparición de la sociedad civil y de las organizaciones no gubernamentales, el proceso de globalización, las nuevas formas de trabajo, las manifestaciones del capitalismo avanzado, los valores de las nuevas generaciones y el ecologismo. A partir de la observación de las crisis que de nuestro tiempo, Offe estudia la evolución y los límites del capitalismo (el 'capitalismo desorganizado') en la consolidación de estructuras organizadas, pero advierte que son las contradicciones de su lógica acumulativa las que le llevan a desvirtuar la naturaleza de la democracia en la que se asienta.

El empuje compulsivo del capitalismo provoca los procesos de desregulación del espacio público, que debilita todas aquellas instancias ajenas a la dimensión económica y mercantil, con el consiguiente vaciado de contenido de la democracia, la erosión del Estado del bienestar, la precarización de las relaciones laborales, etc. Al tiempo, señala Offe, se produce una degradación de la representación política y una tendencia autoritaria en el seno de los partidos, que oligarquizan en poder político y genera 'lealtades pasivas'; pero también observa que se forman soluciones nacidas en la sociedad civil, basadas en la solidaridad, en la paz y la seguridad ecológica. No hay globalización posible, mantiene Offe, sin una recuperación de la dimensión social del Estado, de su vertiente benefactora, a través del protagonismo y de la presión politizada de la sociedad civil.

TESIS PRINCIPAL DEL TEXTO

En el séptimo capítulo del libro Partidos políticos y nuevos movimientos sociales, Claus Offe dice que “Se está cuestionando la utilidad analítica constante de la dicotomía convencional entre el ‘Estado’ y la ‘sociedad civil’. Se observan procesos de fusión entre ambas esferas, no sólo a nivel de manifestaciones globales sociopolíticas, sino también al nivel de los ciudadanos como los actores políticos primarios” (pág. 163-164).

Offe, hace referencia al colapso de la autonomía y autoridad de las esferas institucionales no políticas, con el consiguiente aumento de su dependencia de la regulación y del apoyo político. De este modo es como se empieza hablar sobre el tema principal del libro y el capítulo en específico, los nuevos movimientos sociales, los cuales proponen una politización de la sociedad civil, en la búsqueda de una autonomía del Estado.

DEVENIR ARGUMENTATIVO

Offe, empieza hablando sobre su análisis de la nueva política y los nuevos movimientos sociales. Expone que los canales de comunicación institucionales, pueden ser de poca eficiencia como medios de comunicación política. Los fundamentos culturales y estructurales “autónomos” en diferentes sistemas, son tan cuestionados que la una forma de que sigan existiendo es mediante la participación de recursos y reglas políticas. Según un análisis neoconservador, al extenderse la política pública y el apoyo a áreas que eran más independientes, el Estado pierde autoridad.

Se presentan de este modo 3 bases que son:

1. El aumento de ideologías y actitudes participativas que llevan a la gente a servirse cada vez más del repertorio de los derechos existentes.

2. El uso creciente de formas no institucionales de participación política.

3. Las exigencias políticas en cuestiones morales o económicas, más que políticas.

Las anteriormente nombradas son las bases que sirven en el desarrollo de las sociedades occidentales, lo cual busca tener un mayor control de las elites políticas. Es de este modo que si el Estado pierde autoridad política, se pierde la “estabilidad, ya que es limitada y por tanto, complementada por esferas de acción no-políticas y auto sustentadas que sirven tanto para exonerar a la autoridad política, como para equiparla con fuentes de legitimidad” (pág. 165). Se crea el proyecto neoconservador que busca replantear la política. “El enfoque político de los nuevos movimientos sociales comparte con los encargados neoconservadores un planteamiento analítico importante. Ambos parten de que no pueden seguirse resolviendo con una perspectiva prometedora y coherente los conflictos y las contradicciones de la sociedad industrial avanza por medio del estatismo, la regulación política e incluyendo más u más exigencias y cuestiones en el temario de las autoridades burocráticas.” (pág. 166).

Los nuevos movimientos sociales, reconstruyen la sociedad civil, que deja de someterse a un control cada vez mayor. Para lograr una independencia del Estado, se debe politizar la sociedad civil. Para analizar la nueva política que se da a través de los movimientos políticos nuevos de la siguiente manera: 1. El viejo paradigma, 2. El nuevo paradigma, 3. La explicación de la aparición de los nuevos paradigmas. Para Offe la problemática de la sociedad moderna en cuanto a la política es “el hecho de mantener la diversidad en el interior de la sociedad civil, tratando de encontrar una medida de unidad” (pág. 168).La solución de esta se da de una manera más eficaz en un sistema político donde existe una diversidad de interés; esto demuestra que la facilidad de resolver problemas depende del sistema político que se ejerce.

Luego de esto Offe desarrolla el análisis del viejo ‘paradigma’, el que fue dominante durante la postguerra de la II Guerra Mundial, expone que no todo puede ser designado como político. Offe expone los siguiente “en cualquier política dada hay siempre un marco valorativo compartido relativamente estable y relativamente dominante por medio del que los intereses se reconocen como tales. En cualquier momento y en cualquier sociedad dada, hay siempre una configuración ‘hegemónica’ de los temas que, en general, se consideran que merecen tener prioridad y ser tratados como centrales y respecto a los que se mide ante todo el éxito y el progreso político, mientras que otros quedan marginados o se consideran como completamente ‘extraños’ a la política” (Pág. 169)

“En tal sentido, los temas claves hoy en el orden de la política en Europa occidental, durante el periodo que se extiende desde los primeros años de la postguerra hasta el inicio de los setenta, se han referido al crecimiento económico, la distribución y la seguridad” (pág. 169) Los sindicatos y partidos socialistas se hacen leales al sistema, ya que consolida el capitalismo, el cual es complementado por las organizaciones sociales.

El Estado de Bienestar, maneja un supuesto sociológico en el que se habla de lo ‘privatizado’, en el cual el estilo de vida central es: la familia, el trabajo y el consumo, esta vida no le da tiempo a las personas, esto hace que muchos se queden sin poder ejercer su participación política, ya sea por falta de tiempo o por falta de energía, esto hace que el individuo no sea el actor dominante, sino que lo empiecen a ser los partidos políticos y los grupos con intereses particulares. Estos dos lo que buscan es beneficios en solución de conflictos, por los que luchan y en cuanto a los partidos políticos la lucha entre ello por tener un gobierno el cual sea representado por uno de sus miembros.

Luego de describir en que se basaba el ‘viejo paradigma’, se describe el ‘nuevo paradigma’, se debe tener presente la teoría liberal la cual categoriza lo privado y lo público, pero estos nuevos movimientos no se encuentran en ninguno de los dos, esta una ‘categoría intermedia’ como lo dice Offe.

Los nuevos movimientos sociales son el resultado de un espacio de política no institucional, haciendo una comparación: los partidos políticos tienen todo completamente constituido, como visión, misión, etc., los nuevos movimientos no tienen algo tan ‘serio’ por decirlo de alguna forma, son un poco más informales y menos legitimas. Estos nuevos movimientos son los que revindican ser reconocidos como actores políticos por la comunidad, amplía la relación que tiene estos dos paradigmas ‘’ el viejo y el nuevo’’, es a favor de una nueva hipótesis de profundización de la zanja que ciertamente

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