REPENSAR LA POBREZA

REPENSAR LA POBREZA

Este libro me ha dado la sensación de cómo se puede mezclar de tenacidad, humildad y rigor que caracteriza a la investigación realizada a lo largo de muchos años y en buen número de países, en la que se basa el libro. Todo esto tratando de hacer entender que la solución es posible, y además construyendo siempre sobre teorías y prácticas con las que en algunas ocasiones no obedecen plenamente, pero cuya aportación al objetivo final de erradicación de la pobreza intentan siempre reconocer y utilizar.

El hecho de no aceptar explicaciones sencillas ni adaptar las interpretaciones de los hechos a las creencias previas, el continuo deseo de preguntar e intentar entender todos los aspectos debido a que con frecuencia nos basamos en ideas previas y privilegiamos las interpretaciones de los hechos que más se adaptan a nuestras ideas o experiencias.

Después de este análisis general y centrándonos en el primer capítulo de este libro, el mismo nos habla de que es fácil derribarse ante la magnitud del problema, no lo hacen saber mostrándonos que existen medios que generan mover fibras especificas en las personas, pero si se logra que estas personas dejen de lado esto y se comprometan a ayudar de manera general la pobreza no será vista como un tema abrumador sino como un problema que envuelve otros pequeños inconvenientes, los cuales si se les analiza individualmente se logre encontrar una solución para cada uno de ellos

De acuerdo con los autores es posible conseguir un avance muy significativo en la lucha contra el mayor problema del mundo mediante la colecta de una serie de pasos, cada uno de ellos bien pensado, probado cuidadosamente y realizado con criterio. Así mismo nos dicen que la opción más viable para que el algún momento la pobreza se termine se encuentra en el conocimiento que se va haciendo más grande si se hacen las preguntas correctas, si las respuestas que se obtienen y sus acompañamientos son los indicados.

También hacen una recomendación a que se deje de lado ese pensamiento de que luchar contra la pobreza es muy angustiante, debido a que es un problema que como se dijo anteriormente tiene solución si se trabaja en cada uno de los problemas que esta conlleva.

Por otro lado, nos hablan del porque las políticas que pueden generar una ayuda no tienen el impacto que se espera en realidad y esto lo llaman las “tres íes”: ideología, ignorancia e inercia, por parte de expertos, de trabajadores del ámbito de la ayuda o de dirigentes y gestores locales. Esto se debe y llevando al contexto actual del mundo a que en muchas situaciones de crisis los gobiernos implementan políticas las cuales buscan ayudar al mayor número de hogares que se encuentran en la pobreza, pero algo que no prevén es que el número de ayudas que ellos tienen en mente en realidad es inferior al número de personas que requieren de estas

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