Variables económicas. México

Variables económicas:

• La economía mexicana  se expande a una tasa anual de crecimiento moderado del 2.4 %
• Reducción del crecimiento anual del PIB en alrededor de 0.4 puntos porcentuales debido a la caída de producción de petróleo  y a la poca productividad en la industria.
• Se espera una recuperación gradual de la actividad económica para continuar con el fortalecimiento del crecimiento económico del 2,3 por ciento en 2015 a 3,0 por ciento en 2017.
•  El gobierno decidió responder a los menores ingresos del petróleo mediante la reducción del gasto del sector público en 2015 y 2016, en un 0,7 por ciento del PIB en cada año.
• Depreciación sustancial del peso mexicano en relación con el dólar de los Estados Unidos

Análisis:

México ha tenido  un crecimiento económico no muy alto, pero por otra parte se han presentado diversos acontecimientos tanto internos como externos que provocan problemas económicos en el país, como son: La devaluación del peso ante el dólar, la baja producción de petróleo entre otras cosas más.

Para una mayor producción económica, el gobierno ha decidido implementar nuevas estrategias o proyectos para el desarrollo económico, los cuales tienen expectativas de un crecimiento considerable en tanto al PIB en un lapso de 2 o 3 años, idea que suena esperanzadora pero un tanto complicada de realizar, ya que las nuevas estrategias económicas se basan en la exportación y en la producción industrial la cual este año ha presentado una caída de producción ante Estados Unidos, por lo cual primero se tienen que resolver varios problemas en el ámbito de producción para llevar a cabo dichas estrategias.

Comentario:

Es muy obvio el impacto que causan las variables económicas en el crecimiento de un país, ya sea para bien o para mal, desafortunadamente México ha presentado ambas ocasiones causando una inestabilidad económica, causando las nuevas reformas y estrategias económicas.

En lo personal considero que la intención o la idea de los nuevos proyectos es buena y favorable para el desarrollo económico del país, pero entre la idealización y la realización hay una gran diferencia, y llevar a cabo estas estrategias se ve un poco complicado debido a las circunstancias en que vive el país, creo que lo mejor sería resolver los problemas económicos internos para después adentrarnos con totalidad a la economía mundial.

La economía mexicana continúa expandiéndose a una tasa anual de crecimiento moderado del 2,4 por ciento ya que la recuperación económica perdió fuerza durante la primera mitad de 2015. Un crecimiento moderado durante el primer semestre de 2015, en México se ha atribuido a la debilidad de la producción industrial en los EE.UU. , una nueva caída en el volumen de la producción de petróleo para reducir el crecimiento anual del PIB en alrededor de 0,4 puntos porcentuales y la volatilidad de los mercados financieros. Se espera una recuperación gradual de la actividad económica para continuar con el fortalecimiento del crecimiento económico del 2,3 por ciento en 2015 a 3,0 por ciento en 2017. La expansión de la actividad económica se basará en el crecimiento del consumo privado y la inversión, con un aumento en las exportaciones de manufacturas tras la significativa verdadero ajuste de tipo de cambio y un crecimiento robusto en los EE.UU., finalmente, proporcionar apoyo adicional.

Los ingresos del sector público mostró un buen desempeño debido principalmente a un fuerte aumento de impuestos sobre la renta, lo que refleja el impacto diferido de la reforma fiscal de los ingresos que mejoran promulgada a finales de 2013. Los impuestos más altos ingresos y los impuestos especiales de combustible compensa los menores ingresos del petróleo del sector público debido a la disminución de producción de petróleo y los precios del petróleo mucho más bajos. Anticipándose a los bajos precios del petróleo de mayor duración, el gobierno está reduciendo los gastos del sector público en un período de dos años (2015-2016). A pesar de mayores ingresos y los ingresos fiscales sobre el consumo y con el fin de mantener los planes de consolidación fiscal, el gobierno decidió responder a los menores ingresos del petróleo mediante la reducción del gasto del sector público en 2015 y 2016, en un 0,7 por ciento del PIB en cada año. Un fuerte compromiso con la solidez de las finanzas públicas es el núcleo de la respuesta de la política del gobierno de los desafíos planteados por un entorno externo cada vez más complicada, a pesar del impacto de amortiguación posible en el ritmo de crecimiento económico.

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