Antecedentes Biogas

Antecedentes

El uso del gas natural compuesto en su mayoría por metano se origina en los pueblos chinos y persas desde hace miles de años, los cuales lo utilizaban como generador de temperatura, sin embargo no se conocía que este compuesto se producía constantemente.1

Durante los años 1600 varios científicos comienzan a mencionar sobre un gas proveniente de la descomposición orgánica. Fue entonces que durante la Segunda Guerra Mundial se difunde la idea de los biodigestores, tanto en Europa como en China e India, pero este proyecto se volvió innecesario debido a que existía un fácil acceso a los combustibles fósiles.

A partir de la década de los 70 del siglo XX se reinicia esta investigación y se expande hasta los países latinoamericanos debido a la segunda guerra árabe-israelí; el consumo masivo del petróleo en países como Estados Unidos y Japón, y el conflicto entre países en donde quedaba prohibida la exportación del mismo provocaron la inflación del precio de este de una manera preocupante y la reducción de la actividad económica, a causa de esto se empezó una búsqueda de alternativas que permitieran la producción de energía.

Es entonces cuando se experimentó con reactores, los llamados de alta carga, capaces de retener los microorganismos anaerobios y de tratar las aguas residuales mediante este proceso. (TIQUE, 2008)

En el año 1776 el científico italiano Volta descubrió que el principal compuesto del gas natural era metano. Sólo 100 años después se descubrió el origen microbiológico de la formación de metano.

En el año 1887 el científico Hoppe-Seyler pudo comprobar la formación de metano a partir de acetato. La misma observación hizo Omelianski en 1886 con guano de vacas.

Soehngen descubrió en 1906 la formación de metano a partir de hidrógeno y dióxido de carbono. A su vez, describió los primeros dos organismos que participaban en la formación de metano. (Molina, 2008)

En 1920 Imhoff creó el primer biodigestor en Alemania como frente a la economía de crisis energética.

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