BIOMEDICA

Enajenación en el Capitalismo

Al hablar de “enajenación“estamos hablando de una separación, estar solo y lejos de otros. Para Marx la enajenación no era un sentimiento, ni una condición mental, sino una situación económica y social de las clases.

De acuerdo con Marx la enajenación se refiere a la separación de la masa de asalariados de los productos de su propio trabajo. "El objeto que el trabajo produce, su producto, se presenta como algo opuesto a él, como una fuerza independiente del productor". (Marx).

La mayor parte de nosotros no es dueño de las herramientas, ni de la maquinaria con que trabajamos, y tampoco de los productos que producimos; estos pertenecen al capitalista que nos empleó. Pero todo con lo que trabajamos en algún momento fue producido por nosotros. La ironía es que dondequiera que miremos somos confrontados con la labor de nuestras propias manos y cerebros, sin embargo estos productos de nuestro trabajo aparecen como cosas fuera de nosotros, y fuera de nuestro control.

El trabajo y los productos de nuestro trabajo nos dominan, en vez de lo contrario. En vez de ser un lugar en donde realicemos nuestro potencial, el lugar de trabajo es un lugar al que nos vemos obligados a ir para tener dinero para comprar las cosas que necesitamos y necesarias para nuestra supervivencia.

El trabajador se siente augusto cuando no trabaja, e incómodo cuando trabaja. Su trabajo, no es voluntario sino forzado. Así que no es la satisfacción de una necesidad pero un medio de satisfacer las necesidades fuera de éste.

En la producción capitalista, los bienes se producen para el mercado, para obtener una ganancia. Lo que importa para el trabajador es que él o ella obtengan un salario adecuado por su trabajo.

Mientras que los capitalistas tengan un mercadeado y pueda ser vendido con una ganancia, a ellos no les interesa un comino si lo que venden son piedras o agua embotellada y el capitalista ve al trabajador como un elemento de la producción y tanto que su trabajo sea explotado lo mas que sea posible.

Así que el objetivo del capitalista es la ganancia, y no el satisfacer las necesidades del obrero los productos del trabajo hecho anteriormente el cual lo llamamos "muerto"; como la maquinaria y los materiales, que son controlados por los capitalistas, dominan completamente el trabajo actual al que llamamos "vivo". De esta manera podríamos decir que los trabajadores son esclavos de la máquina y del proceso del trabajo, este los controla.

Quizás una de las formas más degradantes de la enajenación es la manera en que todo puede convertirse en un objeto que puede ser comprado y vendido, inclusive el sexo. Hay otro aspecto de la enajenación que Marx llamó el "el fetichismo de los bienes". Lo que él quiso decir con esta frase extraña es la manera en que la relación

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