ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

EL NACIMIENTO DE LOS TORNADOS


Enviado por   •  13 de Octubre de 2020  •  Ensayos  •  447 Palabras (2 Páginas)  •  104 Visitas

Página 1 de 2

EL NACIMIENTO DE LOS TORNADOS

En los tiempos antiguos, vivía en la región de Ullumbe un pueblo de la tribu Kanté que dependía para sobrevivir del manejo del clima que gracias a la bondad del Dios Jaguar que regía la naturaleza y determinaba cuando llegaba la temporada de lluvias y de sol. Pero había algo con lo que contaban los habitantes de la madre tierra, era el viento y que estaba encerrado por orden de éste en las mazamorras del cielo con el nombre de Kamsá, porque era consciente del poder restaurador o destructor de ellos, según la fuerza de los mismos, y que traía contenidos nada más y nada menos que fenómenos como las tempestades y borrascas.

Entonces, coexistían los Kamsas tanto positivos como negativos, los cuales en su prisión estaban destinados  a vagar por los puntos cardinales del mundo –norte, sur, este y oeste y noroeste, noreste, suroeste y sureste– y a alterar los fenómenos meteorológicos que hasta el momento se presentaban, dicen los chamanes que en la mayoría de las ocasiones, asumían formas casi humanas en las fronteras del reino de los dioses.  

Un día, los pobladores de la tribu decidieron violar las normas de siembra establecidas por los padres creadores Sun y Katz, realizando quemas que esterilizaban las tierras y acababan convirtiendo fértiles valles en arios desiertos sin esperanza de vida. En venganza, el Dios Jaguar decidió liberar una primera ola violenta de vientos fuertes, en forma de un gigantesco embudo de aire que aparte de levantar los sembrados, incineraba a los propios sembrados y en su recorrido casi infinito, levantando las chozas de la aldea, dejando muertos y muchos desprotegidos a su paso.

Desesperados, los indígenas decidieron clamar a éste para que cesara su castigo y con su voz amplificada por los truenos les dijo: “He aquí, con la liberación del viento en su forma acogedora y refrescante, llegan también los tornados a enseñarles que no se puede jugar con la naturaleza”. De esta forma, con lágrimas en sus rostros y sus cuerpos cubiertos de ceniza, los nativos clamaron por el perdón del Dios felino, el cual conmovido por esta manifestación de amor y respeto, decidió mantenerlos bajo control, pero con la condición del cuidado de los recursos de la pachamama, pero, bajo la advertencia de que una nueva desobediencia, traería consigo, la observación en el cielo, de repentina oscuridad o tono verdoso con el consabido grito furibundo de la tempestad que conlleva la amenaza del tornado, trayendo a la memoria humana, aquella enseñanza ética que les recordaba: “El que no conocer la historia, está condenado a repetirla”, recordándonos que estas embestidas del aire podrán repetirse hasta el final de los tiempos.

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (2.7 Kb)   pdf (27.3 Kb)   docx (7.5 Kb)  
Leer 1 página más »
Disponible sólo en Clubensayos.com