El COVID- 19

Universidad UTE

Carrera de Medicina

Nombre: Priscila Andrade

Curso: 8vo A

El COVID- 19 ha planteado una amenaza para la salud pública mundial, afectando todos los niveles de asistencia sanitaria. Pero es mucho más que una crisis de salud, pues ha generado devastadoras consecuencias sociales y económicas. Dejado en su camino destrucción, muerte, desempleo, inestabilidad, incertidumbre, desesperación y miedo.  En el Ecuador las consecuencias han sido devastadoras, el sistema de salud ha colapsado, principalmente el área de unidad intensiva dado que no cuenta con una cantidad adecuada de ventiladores mecánicos para abastecer a todos los enfermos por COVID -19.  

En EEUU y en algunos países de Europa han anunciado que el tratamiento para el COVID-19 no será accesible para todas las personas, excluyendo a personas con atrofia muscular espinal, enfermedades pulmonares, insuficiencia cardíaca, cirrosis hepática. Incluso el estado de Alabama emitió un documento “Gestión de recursos escasos” en el que establece que las personas con discapacidad mental son candidatos poco probables para el apoyo respiratorio”.  En todos estos casos la razón principal es que no hay medios ni equipos  para abastecer a todos los pacientes (1).

En Ecuador el derecho a la vida en este tiempo de pandemia ha generado varias controversias, sobre la acción correcta a seguir en enfermos graves con COVID-19, esto ha hecho que los médicos tomen decisiones difíciles entre quién vive y quién muere. Los hospitales y las autoridades sanitarias están publicando pautas sobre el racionamiento de los ventiladores, y esas pautas ya están siendo criticadas por grupos de discapacidad y otros. 

El triaje de Manchester se utiliza en Ecuador para identificar y atender   a los pacientes en situación de riesgo vital asegurar la priorización en función del nivel de clasificación, acorde con la urgencia de la condición clínica del paciente(2).  Sin embargo, en el contexto de esta pandemia este triaje se ha dejado de lado, puesto que se está priorizando a las personas que están menos graves y tienen mayor probabilidad de sobrevivir. Se debe tomar en cuenta que una pandemia no niega las obligaciones morales y siempre persiste el deber de cuidar. Considero que, el mejor criterio para determinar la priorización es la mayor necesidad. Otras opciones, no son razonables ni justas. En todo momento se debe aplicar el principio bioético de justicia y no basarse en factores como: edad o discapacidad para priorizar o restringir la atención, dado que siempre retener la atención de salud a una persona vulnerable será inadmisible en cualquier situación.

En este tiempo de coronavirus parece que el sentido general del derecho a la vida ha cambiado mucho, es importante reconocer que la vida tiene un valor objetivo, independiente del estado civil, edad, sexo, condición social, enfermedad, etc. Ese valor no lo otorga la sociedad, ni el propio individuo lo adquiere. Es un derecho fundamental sobre el que se sobreponen el resto de derechos y que debe ser respetado hasta el final de la vida.

Bibliografía

1.         Gulisano Paolo. Discapacitados y ancianos, la eutanasia por Covid-19 es un hecho global - Brujula Cotidiana [Internet]. 2020 [cited 2020 Jun 10]. Available from: https://brujulacotidiana.com/es/discapacitados-y-ancianos-la-eutanasia-por-covid-19-es-un-hecho-global

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