El Secador Solar

Secador Solar

Introducción.

Un secado solar es un método común en el campo empleado por campesinos, para ello emplean una cubierta de plástico calibre 7 para invernadero, simulando un techo de casa cerrado por todos lados o abierto por los lados y edificado sobre un piso en tierra con una lona como superficie o un piso en concreto, el método consiste en la evaporación del agua en el grano (que es lo que usualmente ponen en su interior) por medio del aire caliente que se encapsula, la idea de este proyecto es optimizar este método, rediseñando la estructura para aumentar su efectividad.

Desarrollo.

La idea del proyecto es variar la estructura del secador empleando un diseño que no altere demasiado la practicidad del método pero que multiplique las cualidades que éste ya tiene.

Hay 3 factores claves de los cuales podemos tomar provecho para ello y son:

La forma de la estructura.

Las cualidades del ambiente.

La capacidad calorífica de su base.

La forma de la estructura.

La forma de la estructura influye en la efectividad del método en la manera en que éste interactúe con el medio.

Tipo invernadero sin entradas de aire. (Techo en punta)

Su estructura totalmente cubierta y con ese tipo de geometría implica 2 cosas importantes.

1) Su escasa ventilación hace que el aire humedecido por el vapor de agua no se evacue del sistema, dando lugar a una saturación del aire limitando su capacidad para absorber el vapor de agua, de manera que la puede devolver al grano o puede condensarse en tu techo en gotas de agua que pueden caer al grano nuevamente, cosa que nos lleva al segundo punto.

2) La Geometría de su techo implica que dado un caso de condensación del agua, al tener una inclinación aguda sobre el horizonte, las gotas de agua pueden no deslizarse por la superficie y por ende caer sobre el grano que queremos secar.

También puede darse el caso de escasa cobertura, cosa que implica un desperdicio de calor que bien ayudaría al proceso de secado.

Para esta optimización geométrica se plantean lo siguiente:

Debemos cambiar la forma del techo, quitar las esquinas para evitar en lo posible la caída de gotas de agua sobre el grano. Para ello podemos emplear la forma de medio cilindro que se ve normalmente en invernaderos que además de este beneficio, su geometría permite aprovechar al máximo la luz del sol en cada momento del día.

A su estructura cubierta en ambas caras del cilindro debemos hacer 2 modificaciones para optimizar su ventilación pero aprovechando al máximo el calor capturado en el sistema. Una cara tendrá una abertura en su base y la otra tendrá una abertura en la parte superior. El objeto de estas aberturas juega un papel importante en conjunto con la dirección del viento, pues la primera recomendación para el sistema, es que este debe edificarse en un espacio donde pueda recibir aire libremente donde la cara inferior reciba el viento, las corrientes de aire normalmente soplan con frecuencia en una dirección y cambian en dirección opuesta con el cambio de estación, por ello es recomendable no cortar en las aberturas mencionadas sino más bien dejar un pliegue recogido en ambas caras y ambas alturas para llegado el cambio de dirección del viento simplemente invertir las aberturas.

Optimización del Ambiente

Las aberturas a esas alturas en conjunto con la corriente de aire nos proporcionan una evacuación de aire húmedo sin que se desperdicie calor del sistema, obteniendo un doble efecto de secado, siendo el aire frió seco el que entra por la parte inferior absorbiendo vapor de agua y empujando al aire caliente ya saturado por la abertura opuesta.

Ya mencionadas las propiedades del ambiente que podemos aprovechar como las corrientes de aire para la debida circulación del aire saturado, podemos considerar que este flujo de aire va a enfriar el sistema continuamente, no de manera tan

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