Helicobacter Pylori

A finales del siglo XIX Bizzozero describió la presencia de bacterias espirales en el estomago de perros y gatos, sin embargo, no adquirió verdadera importancia hasta que cultivo Helicobacter Pylori que es un bacilo gran negativo curvado que se encuentra en la mucosa gástrica del estomago humano y que se ha asociado con diferentes enfermedades digestivas como la ulcera y la gastritis, en Australia en 1982, a partir de muestras de mucosa gástrica de pacientes con ulcera y gastritis. Desde 1989 se le considera la especie tipo de un nuevo género. (M López, 1999).

En los primeros estudios realizados con esta bacteria, se pensó que podía ser una nueva especie dentro del género Campylobacter por su aspecto en la tinción Gram y su requerimiento microaerolifílico, aunque presentaba ciertas características atípicas. Sin embargo, los estudios genómicos modernos, especialmente el análisis de secuencias del acido ribonucleico ribosomal 16s (ARNr), permitieron demostrar que Campylobacter y Helicobacter eran dos géneros diferentes. (Kounturek JW, 2003).

Esta bacteria fue redescubierta en 1979 por el patólogo australiano Robín Warren, quien en investigaciones posteriores (a partir de 1981) junto a Barry Marshall, aisló este microorganismo de las mucosas de estómagos humanos y fue el primero que consiguió cultivarlas. (Marshall BJ. 1984)

Helicobacter Pylori es una infección común. En general se contagia por contacto boca a boca o con material fecal. Tiende a propagarse entre personas que viven juntas, que comparten la comida y los baños. (Dr. David Greham, 2004).

Los síntomas pueden ser: dolor de estomago, nauseas o vómitos, acides estomacal, diarrea, eructos, pérdida de peso. (Dr. G. Yasin, 2012).

El diagnostico de Helicobacter Pylori se basa en diferentes técnicas que varían en su grado de agresividad, eficacia y disponibilidad en términos de costo-beneficio. Dentro de estas técnicas se logra el diagnostico mediante la determinación de la respuesta del huésped a la infección por medio de anticuerpos anti Helicobacter Pylori en suero, saliva, jugo gástrico o cultivos de mucosa duodenal, pruebas de ureasa o por observación microscópica de cortes histológicos de biopsia gástrica. (Sanz J, López-Brea M, 1995).

En los países en vías de desarrollo se han observado un alto porcentaje de infección por Helicobacter Pylori, en adolescentes menores de 17 años, y una de las razones por las cuales esto sucede es por la falta de información de las personas y también por no tener una alimentación adecuada. Por ello, se considera de gran interés desarrollar el presente estudio, el cual tiene como objetivo, proponer una alimentación adecuada para evitar la presencia de Helicobacter pylori en adolescentes del Instituto Educacional “María Auxiliadora II”, para así de esta manera poder ayudar a la población de estudio, informando sobre la

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