Informe sobre la energia

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Petróleo

Se espera que la media del precio del crudo importado sea de 21 $/b durante el periodo 2002- 2010 (en dólares de 2000). Este precio es práctica- mente el mismo que el observado de media entre 1986 y 2001. Las estimaciones indican que los pre- cios se incrementarán de forma lineal después de 2010, alcanzado los 25 $ en 2020 y 29 $ en 2030.

La tendencia alcista después de 2010 refleja cambios graduales en los costes marginales de producción y en los patrones de oferta. La pro- ducción de los grandes yacimientos de petróleo, que actualmente ofertan prácticamente la mitad del output de crudo mundial, irá disminuyendo, y cada vez será más necesario obtener petróleo de yacimientos más pequeños, con mayores costes unitarios de producción. La cuota de los grandes yacimientos con respecto a la producción ha dis- minuido bruscamente desde los años 50. Las regiones productoras con incremento de los cos- tes marginales, alto coste y recursos relativamen- te modestos, como América del Norte y el Mar del Norte, irán disminuyendo su producción. Se espera que el petróleo no convencional, como el crudo sintético, juegue un papel importante de

crecimiento en la oferta total durante el periodo estudiado.

Por todo esto, los países importadores de petró- leo, incluyendo numerosos miembros de la AIE, pasarán a depender cada vez más de la oferta de pocos países, principalmente del Próximo Oriente y de la FSU. El grueso de las reservas existentes se encuentra en esas regiones. Los costes de pro- ducción del Próximo Oriente siguen siendo los menores, y esa región está particularmente bien situada para apropiarse de gran parte del incre- mento de la demanda de petróleo. Sin embargo, existen ciertas dudas sobre la capacidad de estos países para financiar la inversión en su territorio. El creciente dominio del mercado de los mayores productores del Próximo Oriente, podría provocar un cambio en sus políticas de producción e inver- sión, con el fin de buscar mayores precios del crudo a largo plazo. Se espera que estos producto- res querrán evitar que un aumento excesivo de los precios pueda llegar a deprimir la demanda y a fomentar la producción de petróleo tanto conven- cional como no convencional en otros países. Los altos precio en 2001 frenaron el crecimiento de la demanda y estimularon una mayor producción en ciertos países no OPEP, como Rusia.

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Gas natural

Los mercados de gas están muy regionaliza- dos, ya que es muy caro transportar gas natural a larga distancia. Los precios pueden diferir mucho a lo largo de las regiones, y pueden divergir den- tro de las regiones, atendiendo a las condiciones de los mercados locales.

En América del Norte, el precio del gas natural se situará en torno a 2,50 $/MBtu (en dólares de 2000) en 2002 y que permanezca en ese nivel hasta 2005. Entonces los precios comenzarán a elevarse, tanto en términos nominales como en términos relativos en comparación con el precio del petróleo, y la creciente demanda dejará atrás la capacidad de producción del gas convencional autóctono. La región se irá haciendo cada vez más dependiente de recursos más caros. Los pre- cios se situarán en 3 $/MBtu en 2010 y continua- rán incrementándose hasta 2030 en línea con los crecientes precios del petróleo.

En Europa, los precios del gas deberían perma- necer constantes desde 2002 hasta 2010 en el entorno de los 2,80 $/MBtu (en dólares de 2000). Se espera que la competencia en el mercado del gas introduzca presiones a la baja sobre los pre-

cios. Los menores márgenes, y los esfuerzos de los reguladores nacionales para reducir las tarifas de acceso podrían reducir los precios finales. Pero el coste de llevar nuevo gas a Europa podría incre- mentarse, según aumenta la distancia hasta donde hay que transportarlo, por lo que el coste del pro- yecto se incrementaría. Este último efecto debería compensar el impacto de la creciente competencia. En la región Asia-Pacífico, se espera que los precios de GLP de Japón caigan en relación con los precios del petróleo y del gas en América del Norte y en Europa durante todo el periodo de previsión. La finalización de numerosos contratos de importa- ciones a largo plazo durante los próximos años dará oportunidades a los compradores japoneses de pre- sionar a la baja los precios de GLP en los nuevos contratos. Los precios en Asia seguirán estando más altos que en América del Norte en 2030, reflejando la continua dependencia de recursos lejanos de gas,

muchos de ellos en forma de GLP.

Si se observa el ratio de los precios del gas en comparación con el petróleo en Europa, Pacífico y América del Norte, se puede ver que en las tres regiones convergerá, lo que refleja tensiones en la oferta de gas en Europa y en América del Norte, y una oferta sin tensiones en el Pacífico. Se espera

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que el gas permanezca un poco más barato que el petróleo en Europa y en América del Norte y lige- ramente más caro en el Pacífico.

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Carbón

El precio internacional del carbón se incre- mentó moderadamente, desde los 34 $/tonelada en 2000, hasta los 38 $/tonelada en 2001 (en dólares 2000), tras una caída prácticamente inin- terrumpida desde principios de los años 80. La disminución de la producción de EE UU fue la principal razón de la recuperación de los precios. El incremento de los precios del petróleo y del gas en 1999 y 2000, provocó que ciertos consu- midores industriales y generadores eléctricos, se trasladaran al carbón, lo que ayudó al aumento del precio del mismo.

Las previsiones indican que los precios del carbón permanecerán estancados en términos rea- les (en dólares de 2000) durante el periodo 2002- 2010 en 39 $/ tonelada. Este precio es práctica- mente el mismo que el observado desde 1997 hasta 2001. En los años posteriores, se espera que los precios se incrementen muy lenta y lineal- mente, alcanzando los 44 $/tonelada en 2030.

El incremento esperado para después de 2010 es el reflejo de la combinación de numerosos fac- tores. Los altos precios del petróleo tras el 2010, incrementarán el precio del carbón por 2 motivos:

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