LABORATORIO DIAGNOSTICO DE SUELOS

LABORATORIO DIAGNOSTICO DE SUELOS

Humedad, Máxima Capacidad de Retención, Textura del Suelo, Color y Densidad.

Elaborado por:

Juan Sebastián Bastidas Moreno(sebastidasmoreno@gmail.com) Sara Vanessa Betancur Jaramillo (sbetancur94@gmail.com) Laura Hernández Preciado (lauris_2594@hotmail.com) Jacqueline Muñoz Ardila (jacqueline-0612@hotmail.com)

Sara Velandia Padilla (saravp2@yahoo.com)

RESUMEN

En la aplicación de metodologías para la determinación de humedad y texturas en diferentes tipos de suelos, la obtención de resultados depende en su mayoría de la exactitud (menor % de error) o que tanto se ha implementado dicha metodología en campo. La medición de estos parámetros es de gran trascendencia en los usos que se le den al suelo, con el fin de buscar un equilibrio ambiental.

En la determinación del % de humedad en el suelo ya que el contenido de agua en el suelo puede variar con el tiempo, mientras que el peso en suelo seco se mantiene estable, se tomó una muestra de suelo húmedo, que fue llevada a la estufa a 105°C durante 24 horas, con la intensión de eliminar la cantidad de agua o humedad contenida en  el mismo suelo y finalmente pesado como suelo seco (Ms).y finalmente  obtener un peso de suelo seco con el que se trabajó para hallar la  máxima capacidad de retención de humedad; Y finalmente la textura fue determinada a partir de los porcentajes de arenas, limos y arcillas mediante el método de Bouyoucos y este se basa en la ley de Stokes “la velocidad de sedimentación es proporcional al tamaño de la partícula”.

INTRODUCCIÓN:

El suelo, una materia viviente que sostiene todo lo que habita encima de nuestra litosfera, ha sido objeto de investigación e indagación por miles de años. Su composición, su color, sus características en general, han llenado las páginas de numerosos libros dedicados al estudio de este soporte de vida. Este informe pretende caracterizar el suelo obtenido por el grupo de laboratorio (en realidad son dos suelos) de acuerdo a propiedades inherentes a este cuerpo de sólidos, con el propósito de catalogarlos de acuerdo a estándares o valores ya establecidos por la literatura. A saber, cualquier suelo, natural o antrópico, es sensible de ser clasificado y cartografiado. (Jaramillo, 2002)

El agua presente en el suelo es un factor determinante sobre diferentes procesos que suceden allí y que afectan de una u otra forma los procesos pedogenéticos y los organismos que viven en este ecosistema. La presencia de partículas de agua en el suelo, como la ausencia de estas mismas, favorecen o impiden procesos pedogenéticos bien documentados        como        las translocaciones       (acumulaciones   o

pérdidas) de masas sólidas en el sistema. Además, la cantidad de agua disponible define la supervivencia de la biota que vive en este sistema y que depende tanto del agua que es retenida por los poros y micro poros del suelo, como de los compuestos orgánicos e inorgánicos disponibles en el mismo.

Ahora bien, sabemos por teoría que el agua analizada y calculada en el laboratorio (al igual que otros gases) se distribuye en el suelo dependiendo del arreglo de las masas solidas que componen su estructura. Esta estructura tiene una influencia directa en propiedades como la densidad aparente, la cual se debe conocer por cualquier persona o institución que esté interesada en intervenir una superficie en particular. A continuación explicaremos el porqué.

Supongamos que la industria de fertilizantes desea aplicar uno de sus productos en particular. La preparación de dicho fertilizante debe ser acorde a las características del suelo. Un excedente de este producto en  el cultivo representaría un impacto ambiental más grave de lo esperado a causa de filtración de nitratos y nitritos que terminaran alterando el ciclo del nitrógeno del cual el suelo hace parte. La determinación de las concentraciones requeridas por el cultivo y la superficie que lo sostiene se pueden estimar con un volumen y una masa conocida. Bien sabemos por química elemental, que la  relación entre estas dos variables (masa y volumen) es la densidad.

Concentración de Fertilizantes, cales, compuestos o productos de origen orgánico, aguas de riego, estimaciones del espacio poroso y análisis del grado

de compactación del suelo, son variables que se pueden estimar acertadamente si se conoce el valor de densidad para este suelo estudiado. Pero, a lo largo de esta introducción, hemos pasado por alto una variable que, irónicamente, es la primera en ser identificada. Inevitablemente los sentidos catalogan sin nuestro permiso cualquier objeto o forma que se cruce frente a nosotros y lo categoriza de acuerdo a una gama de colores inherente a los seres humanos. El pintor Albert Henry Munsell diseño una tabla de colores de muy variadas tonalidades y tres parámetros presentados como matiz, claridad y pureza. Estas tablas hoy en día son utilizadas en la edafología para catalogar los suelos que son objeto de estudio y predecir las razones por las cuales esa muestra en particular tiene ese color. Buena parte de esas razones tienen que ver con la composición, procesos pedogenéticos y cantidad de humedad que hay en este sistema. Cabe resaltar, que el suelo no es homogéneo a lo largo de  todo  el horizonte, y puede presentar ciertos moteos o manchas que pueden alejar al investigador del color verdadero, el cual se observa en el fondo o el global, de este horizonte.

Alterno a este método, el color también puede ser estimado mediante métodos más analíticos. Este es el caso del espectrofotómetro, el cual, a través de un haz de luz atraviesa la muestra de suelo recopilada en un tubo digestor. Todas las longitudes de ondas reconocibles por el hombre atraviesan esta muestra. Los valores reflejados, es decir, las longitudes de ondas que rebotan hacia el punto inicial son capturadas y registradas por el mecanismo del aparato. Una vez sucede    esto,    el    espectrofotómetro

arroja un dato de longitud de onda propia de esta muestra. Es  conocido por la ciencia, que cada elemento presente en la naturaleza tiene un color o una longitud de onda característica. Sabiendo esto, se entiende porque con esta longitud de onda obtenida se puede estimar el color y la composición del horizonte del que esta muestra fue extraída. Por cuestiones de practicidad, la espectrofotometría no fue  utilizada en el laboratorio.

Finalmente, habiendo recopilado toda esta información acerca del suelo en cuestión, se pasa a estudiar una propiedad que le corresponde exclusivamente a la parte parental o inorgánica del suelo: La textura.

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