La enfermedad infecciosa de la rabia

Introducción:

La rabia es una enfermedad infecciosa que ataca a algunos animales, particularmente al perro, que por mordedura de él se transmite a otros y al hombre (Moliner, 2006). Es una enfermedad fatal si se permite convertirse y no se previene con el tratamiento pronto (Braus, 2004). La enfermedad, que se separa típicamente a los seres humanos de animales a través de un rasguño o de una mordedura, causa la inflamación del cerebro, afecta especialmente a las extremidades y se caracteriza además por otros signos neurológicos; antes de una semana, el enfermo muere por parálisis respiratoria (Baer,1982).

La enfermedad también se llama hydrophobia (en esta enfermedad la persona es atormentada con la sed y el temor al agua) porque causa los espasmos dolorosos del músculo en la garganta que evitan el tragar (Braus, 2004). De hecho, esto es qué lleva a las fatalidades en casos no tratados: las víctimas se deshidratan y mueren. Los portadores de la rabia incluyen perros, gatos, mofetas, mapaches, y zorros; los roedores no son probables ser infectados (Braus,2004).

La identificación de la rabia a través de los años, como una enfermedad de los perros puede explicarse por la relación más estrecha del hombre con los perros que los animales salvajes. El perro continúa siendo el principal vector animal en la transmisión de la enfermedad al hombre y otros animales en la mayoría de los países de Asia, África y América del sur. El primer gran brote de rabia en franconia en 1271, cuando unos lobos rabiosos invadieron villas y pueblos, no menos de 30 personas murieron después de ser mordidas. En 1752, la rabia apareció en St. James en Londres y se dieron órdenes de matar a todos los perros simplemente al verlos. En los años de 1759-60 las autoridades de Londres dieron órdenes de matar a todos los perros que anduvieran en la calle, ofreciendo una recompensa de 2 chelines por cada animal muerto. En 1763 apareció la rabia en Francia, Italia y España. Un suceso extraordinario del siglo XX fue el descubrimiento de la rabia en el murciélago en Brasil, y posteriormente en Venezuela y trinidad. Gollaway y Elford (1936) fueron los primeros que informaron sobre el tamaño y el virus de la rabia, encontrando que era de 100- 150 mm. En Europa, la rabia estaba muy extendida en zorros,

pero el número de casos descendió desde 1978, cuando se inició la inmunización antirrábica por vía oral.

La rabia es una enfermedad fundamentalmente de animales. En la actualidad, las únicas zonas sin rabia en la población de animales incluyen Australia, Nueva Zelanda, Nueva Guinea, Japón, Hawái, Taiwán, Oceanía, el Reino Unido Irlanda, Islandia, la parte continental de Noruega, Suecia, Finlandia, Portugal, Grecia y algunas de las islas de Antillanas y del Atlántico.

Desde 1986, de han notificado casos de rabia en murciélagos en Dinamarca,

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