Los derechos de primera generación
Enviado por angelchingopobre • 2 de Agosto de 2012 • Informes • 271 Palabras (2 Páginas) • 749 Visitas
jajajajajajajajajajajajajaCORPORACION UNIVERSITARIA AMERICANA
Derecho Constitucional
Derechos De Primera, Segunda y Tercera Generación
GLEDIS PERNETT JULIO
17/03/2012
Este documento contiene el trabajo de investigación sobre derechos de primera, segunda y tercera generación. Presentado al profesos Luis Alberto González
DERECHOS DE PRIMERA GENERACION
Los derechos de primera generación fueron consagrados en los ordenamientos jurídicos internos e internacionales, estos surgieron como respuestas a los reclamos que propiciaron los principales movimientos revolucionarios de finales de siglo XVIII en occidente, estas exigencias fueron consagradas como autentico derecho y también se les conoce como derechos civiles y políticos.
Estos derechos están destinados a proteger el ser humano individualmente, contra cualquier agresión de algún órgano público.
CARACTERISTICAS:
• Imponen al estado el deber de abstenerse de interferir en el ejercicio y pleno goce de estos derechos por parte del ser humano. Organizando la fuerza pública.
• El estado debe limitarse a garantizar el libre goce de estos derechos, organizando la fuerza pública y creando mecanismos judiciales que los protejan, estos derechos civiles y políticos pueden ser reclamados en cualquier momento y cualquier lugar, salvo en aquellas circunstancias de emergencias que permiten el establecimiento de ciertas limitaciones de solo algunas garantías.
Estos derechos civiles y políticos son:
1. Toda persona tiene derechos y libertades fundamentales sin distinción de raza, sexo, color, idioma, posición social o económica.
2. Todo individuo tiene derecho a la vida a la libertad y a la seguridad jurídica.
3. Nadie estará sometido a esclavitud o servidumbre
4. Nadie será sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes, ni se le podrá ocasionar daño físico, psíquico o moral.
5. Nadie puede ser molestado arbitrariamente en su vida privada, familiar, domicilio o correspondencia, ni sufrir ataques a su honra o reputación.
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