Me Llamo Rojo

El capitulo 19, del libro “Me llamo rojo”, titulado “Yo, el dinero”, narra la historia de diversos sucesos acontecidos en Estambul, durante en la época en la que apenas se estaba estableciendo el dinero como medida de valor para esta ciudad. Esta historia es relatada desde la perspectiva de una moneda falsa. Empieza con su llegada a Estambul desde su producción en Venecia y luego sigue con la narración de su vida a través del bolsillo de varias personas.

Al ver como transcurre la vida de una moneda podemos ver como es la evolución de los medios de pago en una ciudad. Pero antes de llegar a la conclusión anterior, tendríamos que relacionar el texto con capitulo 4 del libro de macroeconomía de Mankiw, el cual habla del dinero, sus funciones. Lo anterior con el fin de percibir las transformaciones del mundo a partir del dinero y de esta forma poder conocer sus consecuencias.

El impacto del dinero en la humanidad es masivo y para el estudio de la macroeconomía es crucial. Todos los impactos estudiados desde el punto de vista macroeconómico requieren del dinero para ser entendidos. En el texto podemos ver como la moneda genera un cambio en las personas y como diferentes choques generan transformaciones en la economía de la ciudad.

Al principio del texto el personaje principal, la moneda, habla de la facilidad que es para los hombres reconocer el valor de las cosas al tener una misma medida para todo. La moneda resalta como la vida se ha vuelto mucho mas fácil gracias a la posibilidad de medir, quien tiene mayor valor y quien menos. A lo que la moneda diría: “no hay otra medida del talento del ilustrador que yo” haciendo referencia al dinero como tal.

Nace el dinero como medio de pago, lo cual es reflejado en el texto con el número de transacciones que se realizan con la moneda. Además, como reserva de valor, situación que se ve reflejada en el campesino que entierra sus monedas para el futuro y como unidad de cuenta que entendemos por esto en el texto vemos que por fin hay una medida del “talento”.

Analizando la ciudad de Estambul bajo el sentido macro y basándonos en la lectura y lo visto en clase podemos distinguir varios aspectos que hacen de esta ciudad baja en ingresos con alto porcentaje de inflación.

Para hablar de los ingresos de la ciudad tenemos que empezar a hablar primero del concepto que se conoce como la velocidad del dinero. De la lectura vemos que la moneda pasa muchas veces de mano (transacciones) en un periodo corto de tiempo (560 veces en 7 años) considerando la época podemos concluir que es un nivel alto de transacciones dado que es el momento en el que se empieza a reconocer una moneda como misma y se describe en el texto que son pocas las veces en las que se ha quedado en un lugar guardada para ser usada en el futuro (ahorro). A lo anterior se le puede agregar además que hay una gran oferta de dinero al cual se le suma el dinero falso que ha empezado a circular en Estambul falsificado por los venecianos. Sabemos que es un gran porcentaje debido a que es tan común ese dinero falso que todos saben como reconocerlo y es un gran negocio para los venecianos producirlas. Otra cosa que nos indica el rápido movimiento del dinero, es la cantidad de monedas falsas que al ser reconocidas como ilegitimas, aceleran la velocidad de dinero para poder deshacerse de ellas como vemos en este fragmento narrado por la moneda falsa: “ La mayoría de mis poseedores, sobretodo si descubrían que era falsa, querían librarse cuanto antes de mi”.

Cuando hablamos de los ingresos de la ciudad vemos que una alta movilidad de capital va en contra de pensar que los habitantes de la ciudad porque la demanda que existe entre el dinero y la ecuación de la teoría cuantitativa del dinero nos demuestra que al relacionar ambas ecuaciones es difícil que las personas mantengan un nivel de ingresos elevado si el dinero cambia de manos muchas veces. El capital y la velocidad

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