NICHO ECOLÓGICO

NICHO ECOLÓGICO

El nicho ecológico es la interrelación que existe de un organismo con los factores ecológicos, es decir, la posición o función de una población o parte de ella en el ecosistema. La función que cumple cada especie en el ecosistema, o sea, su nicho ecológico, es determinada por una serie de factores, siendo el principal la competencia con otras especies. En ese preciso equilibrio del ecosistema es difícil encontrar el nicho del hombre. Cualquier tratado de ecología está lleno de ofensas contra el hombre, porque este no logra adaptarse a las leyes de los ecosistemas, la alimentación del hombre en efecto, no depende de una función o de un nicho, sino de su capacidad para transformar los ecosistemas en sistemas artificiales, depende de su plataforma tecnológica y no de su nicho.

Las actividades humanas amenazan el equilibrio natural de la Tierra, talar árboles, contaminar el aire y el agua o dejar que los desiertos se extiendan son las formas mediante las que el ser humano altera el medio ambiente. Si los daños causados al ambiente en que vivimos continúan, la Tierra pronto estará en peligro. Podría dejar de ser un planeta vivo. El ser humano ha ejercido tal impacto en nuestro planeta que no cabe duda que el clima y la geografía están siendo (y serán) modificados drásticamente, debido al efecto invernadero, causado por la despreocupación y el egoísmo humano. Además, por nuestra intervención, distintas especies del reino animal y vegetal han desaparecido.

En cuanto a cuál es mi nicho ecológico, es la responsabilidad que tengo con el medio ambiente, mi comportamiento adecuado con la comunidad y la sociedad de la flora y la fauna, en la conservación de la energía, los seres vivos que habitan en el planeta y mantener el equilibrio de la ecología. Por lo anterior puedo decir que cada vez que escucho e investigo más a afondo el tema del medio ambiente, entro en un grado de sensibilización y responsabilidad de cuidar y proteger el medio ambiente, por ejemplo ahorrar energía en mi casa, trabajo o cualquier sitio, no dejando luces encendidas cuando no son necesarias, apagando el computador, la televisión o cualquier aparato eléctrico cuando no lo estamos usando, colocando a cargar el celular solo por 2 horas el cual es el tiempo prudente para cargar y desconectando cuándo no esté en uso.

El agua es un bien preciado, por ello no hay que malgastarla dejando grifos abiertos. También evitando contaminarla con productos de limpieza y aseo personal que no son ecológicos cuando estoy en algún río.

Colaborar con la recogida selectiva de basuras trae muchos beneficios al medio ambiente. Reciclar el papel, los plásticos, las latas y el vidrio evitaran que nuevos bosques sean talados o que un proceso industrial contaminante los produzca, igualmente imprimir solo lo que es estrictamente necesario y reutilizando las hojas y los sobres.

En estos principios que parecen muy fáciles a la vez se convierten en tareas muy duras debido que los humanos cuando tenemos agua, luz y vida somos egoístas con las personas que de pronto están sintiendo algún tipo de escasez y más triste con extinción de los animales, por eso no me parece prudente en tener animales como los pajaritos en mi casa porque sería robarles su hábitat, o simplemente por ignorancia en no preocuparnos por el planeta en que vivimos. La pérdida del nicho ecológico significa para las especies algo muy similar a la muerte social que representa la locura dentro del orden humano.

Por todo esto y la responsabilidad que el ser humano tiene como principal destructor del medio ambiente y el único que tiene en sus manos lo posible para ir remediando los daños causados, existe un sistema de gestión ambiental de acuerdo con la especificación de la norma NTC-ISO 14004 como resultado en un mejoramiento del desempeño ambiental. Tal especificación se basa en el concepto de que

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