Naturaleza

Desde que el hombre es hombre y ha tenido uso de razón, ha tratado de explicar aquello que no entiende desde su estrecha perspectiva.

La Ciencia nos ha dado los elementos para entender la última realidad, el funcionamiento de la naturaleza, desde la mecánica de lo infinitamente pequeño, hasta el estudio de las más grandes estructuras galácticas, incluido el pasado y el futuro de nuestro Universo.

Pero también la ciencia ortodoxa nos ha privado a veces, de poder abarcar el estudio de fenómenos no habituales, o que no podían explicarse adecuadamente, por la sencilla razón que la ocurrencia de estos fenómenos estaba más allá de los principios universalmente aceptados.

Los fenómenos paranormales son un ejemplo de ello. Esquivos, extraños, parecen vencer las leyes fundamentales que rigen nuestro Universo, y sin embargo ocurren, siendo experimentados por un gran porcentaje de la población.

La Parapsicología, con más de setenta años de investigación se ha convertido en una rama de la ciencia, sin embargo, la propia naturaleza de los fenómenos que estudia, ha conspirado contra su aceptación como tal por parte de toda la comunidad científica.

Permítame recordarle al lector que la Mecánica Cuántica y la Relatividad (hoy totalmente aceptadas y pilares fundamentales de la Física), eran vistas de la misma manera en el momento de su aparición, y no podemos dejar de mencionar la Teoría de la Evolución de Darwin, que ponía en tela de juicio un concepto indiscutible hasta ese momento, y que hoy, después de una centuria, sigue teniendo encarnizados detractores.

El estudio del Fenómeno Ovni peca de estos mismos problemas, con el agravante que es imposible investigar el fenómeno en sí (no tenemos acceso al ovni), solamente podemos evaluar sus consecuencias y elaborar teorías que satisfagan las circunstancias de los avistamientos.

Carl Sagan, el gran divulgador científico de nuestro tiempo, decía que "ser escéptico es la mejor forma de no equivocarse", pero también expresaba que no había que cerrar la mente, negando a priori nuevas posibilidades.

Y en este trabajo voy a hablar de nuevas posibilidades que tal vez sean la puerta a nuestra conexión con el Cosmos, o a la última explotación del hombre por el hombre.

Muchos secretos guarda la naturaleza y muchos más aún guardan los hombres en su infinito afán de poder y dominación.

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