Nervio Optico

d10. División anatómica del nervio óptico.

El nervio óptico puede dividirse en cuatro porciones:

1) intraocular, de aproximadamente 1 a 2 mm de diámetro y 1 mm de largo;

2) intraorbitaria, de aproximadamente 3 a 4 mm de diámetro como resultado de la mielinización y las cubiertas meníngeas, y 20 a 30 mm de largo,

3) intracanalicular, de aproximadamente 5 mm de largo, y

4) intracraneal, de aproximadamente 10 mm de largo.

D11.

La superficie de la porción intraocular o cabeza del nervio óptico, papila óptica, es la principal guía oftalmoscópica del fondo de ojo. La papila es un disco oval que se forma por la emergencia hacia atrás de los axones que conforman el nervio óptico. Esta compuesta por tejido neural (axones de las células ganglionares), tejido glial de soporte y vasos sanguíneos. Se localiza unos 3 mm nasal a la foveola y unos 0.8 mm por encima de ella. Es la porción del nervio óptico visible dentro del ojo mide 1.5 mm de diámetro.

D12. Cubiertas del nervio óptico:

Las envolturas fibrosas que forman la vaina del nervio óptico se continúan con las meninges. La piamadre se fija con laxitud al nervio cerca del quiasma y sólo por una distancia corta dentro del cráneo, pero se fija de manera estrecha alrededor de la mayor parte de la porción intracanalicular y en toda la infraorbitaria. La piamadre se encuentra constituida por tejido fibroso con múltiples vasos sanguíneos pequeños. Divide las fibras nerviosas en fascículos al enviar múltiples tabiques al interior del nervio.

d13. La piamadre se continúa con la esclerótica y unas cuantas fibras siguen hacia el interior de la coroides y de la lámina cribosa.

La aracnoides entra en contacto con el nervio óptico en el extremo intracraneal del conducto y lo acompaña hasta el globo ocular, donde termina en la esclerótica y en la duramadre suprayacente. Esta vaina es una membrana de tejido conjuntivo diáfano con muchas conexiones tabicadas con la piamadre, a la cual es muy semejante. Se relaciona más de cerca con la piamadre que con la duramadre.

D14. La duramadre que recubre la superficie interna de la bóveda craneana, entra en contacto con el nervio óptico cuando éste abandona el conducto óptico. Al penetrar el nervio en la órbita desde el conducto óptico, la duramadre se divide u forman capas, una de las cuales (la periorbitaria) recubre la cavidad orbitaria y otra forma la cobertura dural exterior del nervio óptico. La duramadre se continúa con los dos tercios exteriores de la esclerótica. Esta constituida por tejido bastante avascular, fibroso, recio, recubierto por endotelio en la superficie interior.

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