Resumen de geografia

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El mundo globalizado: 

Uno de los procesos más importantes en la actualidad es la gran expansión de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (NTIC), que permiten estar en contacto de manera instantánea con cualquier lugar del planeta.

A través de las NTIC los diferentes lugares del mundo se interrelacionan en tiempo real, lo que favorece el aumento de los intercambios comerciales y culturales, y que se compartan a escala mundial ideas, noticias, bienes y servicios. A todo este proceso se lo conoce con el nombre de globalización.

Para que la globalización avanzara fueron necesarios progresos en los medios de transporte, con el fin de llegar más rápido y con menos costo a todas partes. Pero, fundamentalmente, fueron necesarias las políticas económicas para liberar el comercio, es decir, eliminar impuestos y otras trabas a la circulación de mercaderías en todo el mundo. Las políticas de apertura económica fueron promovidas por los países desarrollados y por instituciones internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (RM).

El proceso de globalización no llega por igual ni beneficia del mismo modo a todos los lugares del planeta. Existen sociedades que, gracias a su desarrollo tecnológico o al tipo de bienes que producen, se insertan con más éxito en el mundo globalizado. En cambio, los grupos sociales con menos acceso a los adelantos tecnológicos que producen bienes de poco valor para el mercado mundial quedan prácticamente excluidos de los beneficios de la globalización.

El nuevo rol del Estado y los nuevos actores de poder:

Luego de la Segunda Guerra Mundial, los Estados de los países desarrollados cumplieron un rol fundamental en la planificación de la economía y se transformaron en actores protagonistas del crecimiento económico a partir de la inversión pública en salud, educación e infraestructuras, en la generación de puestos de trabajo para lograr el pleno empleo, y en la intervención de la economía arbitrando entre capitalistas/empresarios y trabajadores. A este Estado, que muchas veces implementó políticas proteccionistas para proteger su industria y su mercado interno, se lo denomina Estado de bienestar.

Cerca de 1970, el aumento de la inflación y la caída en las ventas, fueron los síntomas de una recesión económica, que se profundizó con el aumento del precio del petróleo.

Este aumento fue impuesto por los países productores de petróleo agrupados en la Organización de los Países Exportadores de Petróleo (OPEP), y tuvo como consecuencia el incremento en los costos de producción de las economías de los países más industrializados e importadores de este insumo básico, como Estados Unidos, Ja pón y los países de Europa Occidental.

Todo esto condujo a una reestructuración de la economía mundial, que proponía reducir la intervención del Estado en las economías y dejar a las empresas comercializar libremente en el mercado. Por otro lado, frente al incremento en el costo de la energía, muchas empresas tendieron a fusionarse y a buscar nuevas estrategias de producción, como la deslocalización de plantas industriales en lugares del mundo con ciertas ventajas para disminuir costos, por ejemplo, la mano de obra barata.

Estas ideas neoliberales tomaron fuerza en la década de 1980 en Estados Unidos, Inglaterra y otros países europeos. Estos comenzaron a exigir a los gobiernos de los Estados latinoamericanos y africanos abrir sus economías y generar las condiciones necesarias para la radicación de empresas multinacionales. Frente a la necesidad de atraer inversiones y de generar empleos, muchos gobiernos de países periféricos^[a] implementaron legislaciones laborales^[b] tendientes a favorecer a estas empresas.

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