JOSÉ MARÍA ARGUEDAS Y EL AMOR A LA CULTURA INDÍGENA

 JOSÉ MARÍA ARGUEDAS Y EL AMOR A LA CULTURA INDÍGENA

Podemos apreciar tanto en su bibliografía, cuando su madrastra y hermanastro lo echaban con su hermano menor de su hogar en los momentos en que su padre se ausentaba por el trabajo, los dejaban con los sirvientes de la hacienda, estos eran indios quechuas; al convivir con ellos aprendió el idioma quechua, el cual lo considera un idioma basado en el cariño que sentían los unos por los otros incluso el mismo menciona que se quedó en él dos cosas: La ternura y el amor sin límites de los indios, el amor que se tiene entre ellos mismos, y el amor que le tiene a la naturaleza. Este era el tipo de cariño que el anhelaba debido a la ausencia de su padre y los maltratos que recibía de parte su madrastra y hermanastro.

 Llegó a escapar de su casa con su hermano a un pequeño poblado donde convivió más profundamente con los indios aprendiendo sus costumbres, se dio cuenta de la gran e incontenible fuerza que poseían las comunidades indígenas, vivieron felices con ellos dos años, para después en sus obras colocarlos como modelo de armonía, valores y libertad.

Después de los dos años su padre regreso por ellos y los llevo a Lima. Al llegar allá vio como trataban a los indios, un trato que lo indigno de gran manera, ya que el indio era visto de forma rara o discriminatoria, también era maltratado por esta sociedad; aquellos que le brindaron tanto cariño y ternura eran tratados de tal manera, la sociedad no es justa.

Así que a través de sus obras criticó y juzgo esta sociedad que trataba tan mal a los indígenas, sociedad llena de aquellos que se creen superiores a los demás por el hecho de tener dinero o poder, de corrupción y engaños para justificar y ocultar sus malos actos.

El maltrato al indígena queda sumamente claro en el cuento: “El sueño del pongo” se puede apreciar que el patrón de la hacienda explota laboralmente al pongo y ni siquiera lo trata como a un ser humano, también se observa como un tipo de pirámide social en la cual el Hacendado o patrón de la hacienda estaría en la cima debajo de él estaría los sirvientes y en la parte mas baja el pongo el cual es humillado constantemente de las peores formas posibles. Aunque a través del sueño se llega a interpretar que cada uno tanto patrón como pongo recibirán lo que brindaron a los demás, esto se entiende en la forma que la que los ángeles cambian y la sustancia con la que son cubiertos la cual luego tendrán que lamer del otro.

Según se sabe cuando lo escribió ya estaba en una etapa de depresión, incluso en esos momentos sigue expresando ese trato tan desigualitario con aires de superioridad.

José María Arguedas en un gran escritor del indigenismo, mediante las obras que escribió y su vida nos da a conocer sobre los tratos por los cuales pasaba este, la inhumanidad con la que se lo trataba, la infravaloración y el como los subestimaban, Arguedas trata de que estas situaciones cambien, por eso escribe con ese detalle el maltrato a los indígenas, a sus hermanos, inculcando el amor al indígena, ya que estos son parte de nuestra historia y gracias a ellos es que se siguen manteniendo las antiguas costumbres que nos dejaron nuestros antepasados, claro estas ya están cambiadas pero la esencia aún se conserva.

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