La autonomía del profesorado

La autonomía del profesorado.

                                                                J. Contreras    

-Los valores del profesionalismo y la profesionalidad delos docentes.

-La autonomía ilusoria: el enseñante como profesional técnico.

Texto argumentativo sobre la defensa de los valores considerados como profesionales  en el trabajo docente. Una vez ya entendido lo que es la proletarización docente y la pérdida de autonomía reconocemos que esta profesión solo puede entenderse desde sus características propias como lo son el puesto de trabajo y exigencias a tareas educativas. Se toma al profesionalismo no solo como un status de trabajo, conlleva cierta exigencia de mayor capacidad para enfrentarse a nuevas situaciones y aspectos educativos.

Es un marco de autonomía que se desempeña aumentando responsabilidades, que se debe hacer con integridad y responsabilidad. Por ello es que muchos han dejado de usar la palabra profesionalismo reemplazándola por otra profesionalidad es decir lo que el profesorado pone de su parte y proyecta a través de su práctica docente.

Esta profesionalidad apunta a las cualidades de la práctica docente y la personalidad, y nos dice que no es solo marcas estrategias o clases, si no dar las condiciones para la dirección adecuada.

La enseñanza es un compromiso de carácter moral que se incorpora a la noción de la persona humana libre, se justifica a la enseñanza como oficio moral, se pretenden enseñar cosas que no se justifican por su valor.

Existe una relación entre las personas sobre las que se ejerce la influencia, las enseñanzas se ligan con lo emocional, compromiso, ética, emociones, ya que es un compromiso y una obligación moral.

Aunque los mandatos administrativos dificulten la realización de los valores el compromiso profesional es para modificar situaciones en donde se encuentren estos dilemas. La individualidad se ve fortalecida por los márgenes, ya que todos los días los docentes se encuentran ante decisiones de su misma practica es ahí donde se recalca el compromiso ético como profesionales.

Por lo cual podemos concluir que la autonomía también debe verse desde otro modo, situándose en los modelos sobre lo que significa y requiere el oficio de enseñar.

La autonomía del profesorado.

                                                                J. Contreras    

-Los valores del profesionalismo y la profesionalidad delos docentes.

-La autonomía ilusoria: el enseñante como profesional técnico.

Si bien hemos estado centrando nuestra vista en el contexto de la proletarización del profesorado seria bueno ver también el lado del profesionalismo y la profesionalidad que aunque son semejantes uno acentua los aspectos decriptivos del oficio y el otro se basa en lo que en el caso el profesorado poone de su parte y proyecta en su practica docente.

Quedándonos con la definición de lo ultimo se puede decir que se debería tomar  al profesionalismo no solo como un status de trabajo, ya que conlleva cierta exigencia de mayor capacidad para enfrentarse a nuevas situaciones y aspectos educativos. Es por esto que debemos centrarnos en eso que se aporta la enseñanza no es solo una transmisión de conocimientos; “la primera dimensión de la profesionalidad docente se deriba del hecho de que la enseñanza supone un compromiso de carácter moral para quien la realiza(Contreras 1990, pag. 16) por que se debe ver propiamente con carcter moral incorporándolo a la nocion de el humano libre.”Este compromiso u obligación moral confiere a la actividad de la enseñanza

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