Zorrilla y Don Juan.
Enviado por ibai99 • 7 de Junio de 2016 • Biografías • 2.217 Palabras (9 Páginas) • 311 Visitas
DON JUAN TENORIO
ZORRILLA Y MORAL, José: Don Juan Tenorio, Madrid, Madrid, Catedra, 1989. 11ª edición. Edición de Aniano Peña.
José Zorrilla y Moral nació en Valladolid el 21 de febrero de 1817. Su padre, José Zorrilla Caballero, hombre rígido, jamás llegó a comprender el carácter libre e impulsivo de su hijo, ni aprobó su dedicación a las letras en detrimento de las leyes. Su madre, Nicomedes Moral, era modelo de mujer piadosa, tímida y callada, el polo opuesto del marido.
En 1833 ingresó en la Universidad de Toledo como estudiante de leyes, y en 1835 pasó a la Universidad de Valladolid, pero abandonó sus estudios.
En Madrid, después de abandonar su carrera universitaria, alcanzó fama tras leer unos versos suyos ante el cadáver de Larra (1837). Ocupó el cargo de éste en la redacción de El Español, donde publicó la serie de poemas titulada Poesías (1837).
Su éxito poético se renovaría en 1852 con un poema descriptivo, Granada, que quedó inacabado. En 1839 se casó con Matilde O'Reilly, de la que enviudó muy pronto.
Escribió numerosas leyendas como Cantos del trovador (1840-1841), Vigilias del estío (1842) y Flores perdidas (1843).
En 1837 Zorrilla inició su producción teatral con Vivir loco y morir más, y alcanzó su primer éxito con El zapatero y el rey (1840), a la que siguieron: El eco del torrente (1842), Sancho García (1842), El molino de Guadalajara (1843), El puñal del godo (1843) y Don Juan Tenorio (1844). En estas obras trata temas tradicionales o del Siglo de Oro. También escribió tragedias a la manera clásica, como Sofronia (1843).
En 1846 viajó a Burdeos y París, donde conoció a Alejandro Dumas, George Sand, Teófilo Gautier y Alfred de Musset, que dejarían en él una gran huella.
Zorrilla fue elegido como miembro de la Real Academia Española, cuando solo contaba con 31 años (1848) donde leyó su discurso de envestidura en verso.
En 1855 marchó a México, donde fue protegido por el emperador Maximiliano, que lo nombró director del Teatro Nacional.
Muerta su esposa, regresó a España (1866), donde se le admiraba, pero se le creía superado donde vivió pobremente hasta que el Gobierno le pasó una pequeña pensión. Sin embargo, se hizo famoso de nuevo dando recitales públicos y obtuvo numerosos honores entre los que sobresalen su nombramiento de cronista de Valladolid (1884) y su coronación como poeta nacional en Granada (1889).
Finalmente Zorrilla murió en Madrid (1893), tras una intervención quirúrgica para extraerle un tumor cerebral. Su entierro fue un gran homenaje de admiración.
A finales del siglo XVIII la Revolución Francesa y la Declaración de Independencia de Estados Unidos pusieron en práctica los principios del liberalismo, la libertad individual, la igualdad ante la ley y la soberanía nacional. El Antiguo Régimen fue sustituido por la sociedad liberal, caracterizada por la estructura social de clase y un sistema político parlamentario. La aristocracia tuvo que ceder el poder a la burguesía que era cada vez más rica y poderosa. En el Posteriormente, en el Congreso de Viena se resolvió la Restauración del Antiguo Régimen, pero el modelo liberal se abrió paso gracias a las oleadas revolucionarias de 1820, 1830 y 1848.
En España, el ascenso del liberalismo llegó tras la muerte de Fernando VII en 1833 con el ascenso del infante Carlos gracias a los liberales. Esto significó el ascenso de la burguesía española y el paso de una sociedad plenamente rural a la industrialización y urbanización.
La interrupción del liberalismo trajo consigo la aparición del nacionalismo. Este se dividió en dos ramas.
La democrática supone un reflejo del liberalismo y la soberanía nacional y predominó en las revoluciones de 1848.
Por otro lado está la tendencia conservadora. Esta se trata de un movimiento autoritario, que vinculaba la nación con valores ancestrales como la lengua, la raza o el folclore.
La expresión cultural del nacionalismo fue el Romanticismo, que rechazó el racionalismo ilustrado, al que contrapuso el sentimiento, la libertad individual y la naturaleza como escenario para la evasión. Inicialmente, el Romanticismo estuvo vinculado al nacionalismo conservador, pero, tras la Restauración, los románticos se mostraron más afines al liberalismo.
Zorrilla es un autor romántico de la tendencia conservadora que refleja en sus obras su visión del mundo como romántico escribiendo lírica, prosa y drama. Sus obras se ven influenciadas por eventos de su vida como el rechazo paterno, los amores que tuvo, los viajes que hizo por todo el mundo y su estilo de vida bohemia. Para escribir sus obras se inspira en leyendas populares españolas y la misma historia de España.
Sus obras principales son:
-LÍRICA: religiosa (Ira de Dios, La Virgen al pie de la Cruz), amorosa (Un recuerdo y un suspiro,
A una mujer), sentimental (La meditación, La luna de enero) y tradicional (Toledo, A un torreón)
-ÉPICA: Los Cantos del Trovador (1840), Granada (1852) y La Leyenda del Cid (1882)
-LEYENDAS: A buen juez, mejor testigo La pasionaria, A la memoria de Larra, La azucena silvestre, La princesa Doña Luz, El capitán Montoya y Margarita la tornera
-POEMAS DRAMÁTICOS: El zapatero y el Rey (1839 y 1842), Sancho García (1842), El puñal del godo (1843), Don Juan Tenorio (1844) , La Calentura (1847) y Traidor, inconfeso y mártir (1849)
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