Alabado sea el dios y dinero

Alabado sea Dios y Dinero.

Por: Itzel Abigail Frias de Gante

“Si Dios quisiera, acababa la pobreza. Pero entonces, ¿Quién le rezaba todos los días?”. En el libro “Los Rituales del Caos” de Carlos Monsivais, éste hace alusión a que el cristianismo siempre ha necesitado de los pobres para ser, para existir. En realidad, así funciona incluso con los presidentes, quienes no acabarán con la pobreza ya que necesitan de ella para ganar las elecciones. En ambos casos, se usa la identificación con el pueblo: una virgen morena y un candidato patriota. En ambos casos, la sola imagen puede representar la esperanza que tanto buscan las personas, para calmar las frustraciones del trabajo, de la salud, de lo que fuera. Y mientras hay personas que llegan a poner incluso su vida, hay personas como sacerdotes y políticos con más recursos de los que pudieran gastar.  

¿Y qué es lo que mueve al mundo, sino dinero?, ¿Cómo se alcanza el “éxito” en un sistema capitalista? no se alcanza, se hereda. “El triunfo es cada vez, más herencia genética”, escribe el autor con la justa razón de que en México, una gran parte de las riquezas se obtienen por herencia. Seguimos bajo la creencia de que, en nuestro sistema económico, somos los únicos culpables de nuestra pobreza, pero como bien menciona Monsiváis “Uno no triunfa, uno nace en el triunfo”, considero que tiene la razón, ya que muchos nacen bajo condiciones favorables para su desempeño académico, laboral, personal, y demás. Otra frase que también llama la atención es “El dinero llama dinero”, y que hace referencia a la inversión, un negocio al cual definitivamente no todos tienen oportunidad.¿Y qué pasa con aquellas personas que han tenido la oportunidad de estudiar? de todos los que tienen estudios, solo algunos ejercen, los demás tienen que resignarse ante la falta de empleos y la calidad de los mismos, y harán su vida de acuerdo a ellos. Todo esto, es un círculo vicioso que se repite con una frecuencia aterradora. Es en verdad triste que en este país se aspire a la riqueza como el éxito en estado puro, y que en el camino a este haya más gente quedándose en el tiempo, viviendo monótonamente con la esperanza de que algun dia podria cumplirse su ambicion por la riqueza, y lo peor: que vivan sintiéndose fracasados por no tenerla, cuando quizá deberían sentirse peor por no crecer, por no cambiar.

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