Arte contemporáneo-crítica rese;a

Arte contemporáneo; ¿arte sin estética o muerte del arte?

A propósito del video, se debe reconocer primeramente que el peso ontológico del verbo ser dificulta la definición del arte en sí, pues esta debe trascender y reconocer que los usos del lenguaje han perdido el reflejo de la realidad, además de ser capaz de abarcar todos los contextos; es aquí, donde se advierte del compromiso que supone definirlo, limitarlo. Sin embargo, coincidí en numerosos puntos con el presentador del tema, y a su vez, con la crítica analítica de Arthur Danto, pues va ligada a la mercantilización del arte, a la traición de ese escándalo, de esa trasgresión inicial cuyo objetivo era incomodar, y viene a situarlo al modelo capitalista.

Coincido en innumerables planteamientos de Danto; quien culpa a Warhol de aquella ataraxia; pero es, diría yo, por semejante imparcialidad por parte del “humanista” quien aún, simpatiza con las ideas del mimetismo; donde las obras “encarnan” lo mismo que significan, aparte él ve como un progreso recrear de forma cada vez más verdadera y auténtica la realidad; expresarla tal cual es, cosa que en las vanguardias no pasa, pues su intención no es recrear la existencia, sino revolucionarla y dotarla de un sentido creativo, hacerla indefinible y menos elitista.

Cabe aclarar que Danto consideraba que Warhol había llegado a un máximo mimetismo, con la exposición de esponjas y cajas de cartón que fueron denominadas arte, es decir, su apariencia era tan parecida a los objetos del supermercado, que era la máxima expresión de la intención del arte, ¿pero realmente puede ser considerado arte? “Habiendo cambiado de contexto, el objeto, o elemento, ready made, abandona su condición original y funciona artísticamente.” (Ready made: En el lenguaje del arte del siglo XX recibe este nombre un elemento extraído de la vida real que un artista escoge y propone como obra de arte) Numerosos casos se observan de cómo la belleza se vuelve cada vez más relativa y su producción se deja a un lado, alegando que su objetivo “es ser comprendida.”

¿Pero cuál es el trasfondo de esta comprensión? Danto por su parte, manifiesta que el arte no está allí para eso, sino para provocar disgusto y actitudes, encarnar ideas; pues esa ha sido la fuerza vital de su desarrollo. Pero ahora no puede apreciarse esto, pues la experiencia estética ha quedado a un lado, y aunque se justifiquen en el “resignificado” del arte como una idea cercana a la desmesura, el exceso y el desborde, se ha comprobado que “ingresó al mercado capitalista como un objeto más, atravesado por la lógica de la mercancía.”

Finalmente, quiero perseverar en lo que decía el presentador; del arte como gesto “pasatista” es decir, efímero y pasajero, pero en un sentido general, en esta postmodernidad que sumió a fenómenos estéticos en mercancías valiosas por la simple relación de posesión; donde dejó de irse más allá para optar por la simplicidad, o mediocridad, que algunos tanto denominan alzamiento con lo tradicional; pero que va más allá, pues el hecho de titular, firmar y presentar un objeto como obra de arte para dejarle de atribuir las funciones de la vida cotidiana, no precisamente transformará “su esencia” o fin inicial.

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