Ensayo sobre el destino y los amores frustrados

Ensayo sobre el destino y los amores frustrados

He aquí, caros amigos míos, papel y bol en mano os presento al ignorado relato yaciente en la gran obra  que impelió al principiante lector a seguir con la catártica afición. Hacen ya tres siglos desde que se publicó en Colombia la aclamada novela romántica, pionera en Latinoamérica, María, de Jorge Isaacs. Loable obra en cuanto a prosa refiere, y que en cuyas paginas se transporta al lector a un conmovedor mundo, vaivén de sentimientos y pasiones.

Así pues, a manera de flashback el autor nos presenta un capítulo apartado de la trama principal en la que se nos relata la historia de la criada más estimada de la hacienda El Paraíso, Feliciana, quien padeciendo la infame hepatitis, y acompañada del fiel vástago, fenece, en sus aposentos. No sin antes rememorar las peripecias que tuvo que vivir antes de su llegada a la ya mencionada hacienda. Desde la gesta del temerario Magmahu, quien en vida fue su padre, y adalid de la tribu africana de la cual ella era originaria, pasando por la intrincada relación que contrajo con un prisionero, vástago del líder de la tribu rival y razón por la cual se apartó del amado padre, hasta el infausto destino de ella y los suyos tras la llegada de los blancos colonos a las vernáculas tierras quienes se hallaban en búsqueda de esclavos para venderlos en el nuevo mundo. Nefanda fue la historia porque a Nay (verdadero nombre de Feliciana) le fueron arrebatados todos sus seres amados, Magmahú cayó en batalla producto de la certera bala, y el amado fue cruelmente separado de su lado después de realizada la imposible promesa de reencuentro. Mas los hados le sonrieron pues llevaba ella en su vientre al dichoso hijo que fue con ella recibida por los filántropos padres de Efraín, en la paradisiaca hacienda. La apasionante historia de Feliciana no fue del todo discordante con la diégesis de la obra  pues en ella se vaticinan futuras desgracias que padecerán los amantes protagonistas de la obra: promesas no cumplidas, idílicos romances frustrados  y la postrera sombra que se cierne sobre la cándida alma.

Considero al paralelo relato de la obra un huracán de emociones que trasluce el sentimiento romántico de la época incluso más que la trama principal y recurso interesante de la narración literaria pues vaticina de forma indirecta el destino en el cual se verán envueltos los desafortunados protagonistas y una señal, quizá, del futuro que le depara a Efraín tras la pérdida de su amada. Tras el final abierto de la obra. En efecto, una experiencia de regocijo literario.

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