Entre una roca y una piedra

ENTRE UNA ROCA Y UNA DURA VIDA[pic 1]

DANIEL BERNOULLI Y LA LEY DE PRESIÓN HIDRÁULICA

Daniel Bernoulli tenía treinta y cuatro años. Observo lo maravilloso que sería volar, pensaba con que rapidez era capaz un pájaro podía hacerlo.

Cuando Bernoulli regreso a casa desde Rusia, lo esperaba una carta provenía de Francia, estaba destinada a su padre y a él. Contenía los resultados del concurso de ciencias. El joven Bernoulli había participado cuatro veces y solo había ganado una sola vez. Él era bueno en todos los aspectos de la matemática, pero él estaba enfocado en los problemas de los fluidos. De un punto de vista los fluidos no solo abarcan líquidos, sino también los gases y cualquier material flexible. Los fluidos fascinaban al matemático, porque eran un reto y suficientemente sencillos como para ser escrutables. Los fluidos forman parte de la vida cotidiana y pensó que sería útil y relevante estudiar el comportamiento.  

En el siglo XVII, Isaac Newton había descrito con éxito el comportamiento de los objetos sólidos. sólidos. Y en el siglo XIX los científicos descubrirían las leyes de la genética, de la evolución y de la psicología que regían la actividad de los seres humanos. En medio de estos dos siglos quedaba Bernoulli una época que estaba destinada a los fluidos.

Al leer la carta, Bernoulli aguardó impacientemente la llegada de su padre. Esa noche cuando llego su padre, no hablaron, le entrego la carta y espero a que terminara de leerla. Su padre reacciono con un silencio, arrugo la carta, miro a su hijo soltando acusaciones, su padre, que hacía años había introducido a su hijo en las matemáticas y le había enseñado muchas de las ideas y técnicas, estaba enfurecido al comprobar que al joven se le consideraba ahora como si estuviera a su misma altura.

El joven Bernoulli y su padre discutieron, aumentaban los ruidos que salían de la casa de los Bernoulli, su padre le exigió que abandonara su hogar.

Estaba muy furioso para pedir perdón como para disculparse con su padre a quien admiraba, pero ahora le recelaba. Tardó menos de una hora en recoger sus pertenencias, y al salir por la puerta se detuvo para mirar atrás.

VENI

Los filósofos del renacimiento no se sentían inclinados a las explicaciones sobre naturales acerca de los desconcertantes fenómenos que pasaban a su alrededor.

Los estudios renacentistas llegaron al punto de decir que conociendo las leyes racionales de la naturaleza serían capaces de predecir el futuro. Los astrólogos pretendían tener la capacidad de profetizar el destino de las personas. Pero la ciencia sospechaba su metodología mística, basada en observaciones astronómicas confiables.

Isaac Newton publicó los asombrosos descubrimientos que demostraban el comportamiento de los objetos inanimados.

Los Bernoulli parecían predecibles en algunas cosas. La historia de los Bernoulli comenzó en 1962 cuando Jacob el Viejo huyó a Basilea, en Suiza. su destino fue prosperar en Basilea, casarse tres veces y tener un solo hijo. su único hijo Nikolaus estaba destinado a engendrar una extraordinaria dinastía. Después de casarse, Nikolaus y su esposa tuvieron una docena de hijos de los cuales solo cuatro sobrevivirían hasta ser adultos. Dos de los cuatro hijos dos se convertirían en matemáticos, aunque su padre no lo viera así.

Su padre pensaba que con sus habilidades de Jakob seria teólogo y sus habilidades de Johann indicaban que se convertiría en comerciante. Ellos hicieron caso de las indicaciones de su padre. Y obtuvieron sus títulos.

En 1684 el artículo de Leibniz, provoco poca respuesta, porque muy poca gente podía entender de él. Tampoco los hermanos Bernoulli lograron comprenderlo. Un día Jacob entendió. Las novedosas matemáticas de Leibniz cautivaron los hermanos Bernoulli de formación calvinista, ya que parecía confirmar su creencia en la predestinación.

VIDI

Los humanos hemos vivido en tierra firme, pero le debemos la existencia a los fluidos, Sin agua que beber moriríamos sin aire que respirar, pereceríamos en cuestión de minutos. Afortunada mente tenemos agua y tierra Aristóteles dedujo de los fluidos fue lo que se refería a su densidad, o mejor dicho, a la cualidad opuesta a la densidad, a la que llamó sutileza. «Si el aire es dos veces más sutil que el agua, un cuerpo necesitará dos veces más de tiempo para atravesar la misma distancia en el agua que el aire». Es decir, que es dos veces más fácil moverse en el aire que en el agua. La primera persona que supo discernir una verdad correcta sobre el peculiar comportamiento del agua fue el estudioso siciliano Arquímedes. Lo que había encontrado, como reveló después en un libro llamado Sobre los cuerpos flotantes era la Ley del Empuje, conocida hoy como principio de Arquímedes, según la cual todo objeto sumergido en el agua desplazaba una cantidad de agua equivalente a su propio peso.

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