Falta de sentido de vida

Falta de sentido de vida

Las personas con problemas de inestabilidad emocional en la actualidad  han buscado ayuda profesional para resolver sus problemas pero todo esto con largas conversaciones de la infancia, su comportamiento, antidepresivos, el ser pecaminoso y el perdón de dios; llegando a terapias más prolongadas con un “diagnostico” de una enfermedad que se puede controlar con sus medicamentos especiales. Pero ahora existe una opción contraria que es el asesoramiento filosófico que investiga las cuestiones que todos nos preguntamos como ¿Qué es una buena vida? ¿Qué es el bien? ¿Por qué estoy aquí?

Existe un proceso en el asesoramiento filosófico llamado PEACE que es muy fácil de seguir, consiste en cinco etapas que componen el proceso: problema, emoción, análisis contemplación y equilibrio. Los dos primeros son el asunto donde se pasa de forma natural, las dos siguientes estudian el problema de manera progresiva y la última etapa incorpora a su vida lo que ha aprendido. Tenemos que ser nuestros propios consejeros filósofos, explorar el mundo interior, todos estamos cualificados para nuestro descubrimiento personal por lo que se recomienda analizar sin compañía ya que se piensa con más claridad. Hay que recordar que no todos los problemas tienen una solución inmediata, las grandes exploraciones requieren tiempo y esfuerzo.

Significado y propósito

Hay que distinguir ambos términos antes que nada. El propósito es un objeto o fin que ha de alcanzarse, una meta. El significado tiene que ver con el modo en que comprende su vida sobre una base continuada, se encuentra en el modo en que ocurren las cosa. La comprensión depende de la experiencia y el significado es muy personal. Una persona se siente feliz si tiene un propósito porque al saberlo comprendes mejor el significado. Se puede tener en diferentes momentos de la vida. <> no tienes que aferrarte a nada, ni intentar que nada rebase el límite de su tiempo si se logra un propósito nadie te lo arrebata, no obstante este no es para toda la vida y se encuentra por sí mismo.

 El hecho de que no haya dios no implica que no haya propósito, si no te satisface la explicación que brinda la biblia de la vida, tendrías que buscar otra. El único modo de hacer justicia a la vida es vivir tan plenamente como sea posible. Las adversidades y tragedias nos colocan en el camino a descubrir nuestro propósito, hallar significado en las peores situaciones. Cuando podemos percibir una pauta, tenemos el significado. Cuando tenemos el significado se encuentra el propósito. <>

Es importante no permanecer en el pasado o en el futuro porque esta actitud no hace más que oscurecer el presente con el que de todos modos hay que contar. Aceptar el presente puede ser suficiente para restablecer el sentimiento de significado diario y renovar el propósito de hacer realidad nuestros sueños o metas.

Si existe depresión es posible que tu propósito sea pasar por ella, lo mismo con la ansiedad, la pena y la insatisfacción general, la aflicción merma la calidad de vida y desafía a superarla incluso como en situaciones de cáncer, donde se demuestra que un tratamiento exitoso depende de la actitud del paciente. La causa más común de la perdida de propósito es el aburrimiento, por ejemplo los animales en cautiverio en zoológicos. Si tu meta son los bienes materiales y ya dispones de todos ellos, el sentimiento de no tener más montañas que escalar es desesperante, claro no se está recomendando que provoquen catástrofes solo para mantener interés. Algunos necesitan volver un poco a la vida salvaje para refrescar nuestra sensibilidad, conectarse con el mundo natural de la forma que más te convenga es el modo más seguro de recuperar la perspectiva de su vida, comprender que la vida es un gran regalo y disfrutar de las actividades como parte de la vida diaria son también grandes antídotos contra la carencia de propósito. <>

...