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Humanismo


Enviado por   •  7 de Noviembre de 2014  •  4.785 Palabras (20 Páginas)  •  195 Visitas

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El humanismo.

Fue un movimiento intelectual, que se dio en el siglo XV en la región de Italia, que busco la difusión de los conocimientos para hacer del hombre un individuo verdaderamente humano y natural, en contraposición a lo divino y sobrenatural que constituyeron la meta del medievo. Humanismo viene de "humanisti" que significa amante de la ciencia, del saber, y cultor de las letras.

Es un movimiento intelectual, filosófico y cultural europeo estrechamente ligado al Renacimiento cuyo origen se sitúa en el siglo XIV en la península Itálica (especialmente en Florencia, Roma y Venecia) en personalidades como Dante Alighieri, Francesco Petrarca y Giovanni Boccaccio.

Los principales representantes son:

- Francesco Petrarca: (1304-1374): Italiano, oriundo de Arezzo, Toscana, fue autor del poema "Canto a Laura", dedicado a su amada Laura de Noves. Escribió, también, el poema "África" en latín, donde canta las hazañas de Escipión el Africano.

- Juan Bocaccio (1313-1375): Italiano, de origen toscano, discípulo de Petrarca, escribió "El Decameron", conjunto de cien cuentos de corte realista y, en latín, "Genealogía de los Dioses"

- Erasmo de Rotterdam (1466-1536): Conocido también Desiderio Erasmo, fue un humanista holandés nacido en Rotterdam. Abogo por la reforma gradual y pacifica de la Iglesia, la política y la sociedad. Escribió "Elogio de la locura" y "Los coloquios".

Orígenes del Humanismo.

Empecemos reflexionando en el hecho de que, cuanto más nos remontamos en la historia hasta los orígenes de la humanidad, más nos vamos dando cuenta de la pérdida de la condición humana del ser humano, hasta que ésta se pierde, primero despreciado por la doctrina religiosa como la pura “prisión del alma”, y luego, en la Antigüedad, totalmente fundido con la naturaleza en calidad de cualquier otra especie animal, y en esa misma condición.

No es pues casual, el que la primera forma de la filosofía entre los griegos, el hilozoísmo, no separase al ser humano como algo distinto a la naturaleza. La filosofía presocrática fue exclusivamente una “Filosofía de la Naturaleza”, y el ser humano estaba en ella como un elemento más de la misma.

Fue con Sócrates, entonces, que el pensamiento humano empieza a separar de la naturaleza el fenómeno de lo relativo al ser humano. La célebre frase de éste: “Conócete a ti mismo”, como una forma de expresar: <<distingámonos de lo demás>>; o algo más fino quizá en: <<no confundamos más nuestra identidad>>, expresaba claramente esa intención.

En el Diálog de Plaotón Alcibíades, Platón en la voz de Sócrates pregunta a Alcibiades qué es el hombre, a lo que éste responde que no lo sabe; mas Sócrates, diciéndole: ”pero tu sabes que es algo que se sirve del cuerpo”, le induce entonces a reconocer que el hombre es el alma, dicotomía de lo racional (donde reside lo divino según Sócrates; y en realidad Platón) y lo espiritual. Así, conociendo lo racional, se conocerá mejor el alma, y conociendo el alma, se conocerá el hombre a sí mismo. Platón ha mostrado con ello la preocupación por el ser humano, pero sin responder a qué es precisamente el ser humano, que no sea apenas haber establecido por toda respuesta una metonimia*: el ser humano es el alma.

Contemporáneo de Sócrates en el siglo V ane, fue Protágoras, al cual se debe la frase: “El hombre es la medida de todas las cosas”, base de toda reflexión de la escuela de los sofistas, que si bien pone al hombre en el centro, es claro que más que por una reflexión acerca del mismo, ello está principalmente enunciado como sistema de referencia, es decir, que toda reflexión filosófica, tendrá ahora como referencia ya no a la naturaleza, sino al ser humano.

Mas debemos dejar claro que hay aquí dos objetos de estudio distintos: uno, el del ser humano como algo distinto a la naturaleza; y otro, el que tal simple distinción pudiera ser ya de por sí una reflexión –y de hecho a ello conduce necesariamente– acerca de qué es el ser humano. Desde Sócrates, pasando por Protágoras, por Platón y hasta Aristóteles quien ya escribe no sólo una Política, sino una Ética, bien pudiera pensarse que se avanza en esa reflexión. Sin embargo, el problema real de qué es el ser humano, no se podrá plantear con toda su justedad, sino hasta quince siglos después, en el momento del Renacimiento.

Aún a Aristóteles le hubiera sido del todo imposible deslindarlo sumido en la creencia de la primacía de un Zeus o un Logos entendido como Dios metafísico; y aún por más heraclitiano que fuese dicho Logos, en tanto independiente éste del ser humano, o peor aún, del ser humano subordinado a aquel, difícilmente podría ser una reflexión acerca del ser humano como tal.

Después de Aristóteles vino la descomposición de las escuelas socráticas y surgieron los filósofos de Cirene, los cirenaicos, y los de la Plaza del Cánido, los llamados por ello como los cínicos, y nada relevante se aportó ya. Prácticamente, por los primeros quince siglos de Nuestra Era, bajo el dominio absoluto de la religión, el ser humano como tal, en tanto material, fue despreciado y en su lugar fue privilegiada el alma y su salvación. Demos pues un salto hasta el Renacimiento, y desde ahí consideremos lo que respecto del Humanismo, significó la Edad Media que le antecedió.

Así, en el proceso del movimiento renacentista que se puede considerar en sus orígenes más remotos hasta los ss.VIII-IX, cuando por un lado se refundan las escuelas en la llamada Escuela Palatina (“Escuela de Palacio”) por órdenes de Carlomagno (742-814); Emperador a partir del año 800 del Sacro Imperio Romano Germánico; y por otro lado, cuando Juan Escoto Eriugena (810-877), interviene entre los escolastas Gottschalk (819-868), que de una parte, afirmaba que había una doble predestinación**, o sea, un doble mandato divino, uno de las cuales era para los elegidos; e Hincmaro (776-856) y Maure (780-856), los cuales por su lado, afirmaban una única predestinación común; donde Eriugena, si bien coincidente con estos últimos, da aparte, una solución

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