ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

La fisonomía


Enviado por   •  14 de Febrero de 2013  •  Tesis  •  1.580 Palabras (7 Páginas)  •  273 Visitas

Página 1 de 7

La fisonomía y definición de un cuadro político dependen de la forma que, en cada caso, adopta la interdependencia de tres factores: el individuo, la colectividad y el Estado.

El remoto origen de esa interdependencia reside en el hecho de que, al despuntar la aurora de su existencia sobre el planeta, el hombre, el "animal político" de que hablara ^Aristóteles; encontró indispensable asociarse con sus semejantes para hacer frente a la lucha por la vida.

En concordancia con sus necesidades y aspiraciones crecientes, desde lo simple y rudimentario de la prehistoria hasta lo complejo y sutil de nuestros días, el hombre fue adoptando diferentes normas de convivencia, dentro de la cual surgió el concepto de autoridad como complemento ineludible. Lo que da identidad propia a un orden político es el carácter de esas normas: su inspiración, sus fines, el radio de acción que tienen y el papel más o menos preponderante que, alternativamente, desempeñan el individuo, la colectividad o el Estado. .'

Concretamos este análisis al mundo moderno, que empezará a tomar su forma actual con el liberalismo, cuando van desapareciendo de Europa los últimos vestigios del sistema feudal.

El individualismo, cuya expresión contemporánea es la democracia liberal, tiene como finalidad, en lo filosófico, salvaguardar los derechos "inherentes" a la personalidad, humana, encarnados en el individuo:

la vida, la libertad, la felicidad. En lo material, garantizar la propiedad privada, con sus complementos inseparables, la iniciativa y la empresa también privadas.

La colectividad debe estar organizada de modo que permita y asegure el ejercicio de aquellos "derechos inalienables". Sólo hay un límite para el desarrollo de la actividad individual, y es el que señalan los derechos de los demás. El orden jurídico y ético debe estar establecido en forma tal que asegure la coexistencia pacífica y armónica de las prerrogativas individúales.

El Estado no hace otra cosa que supervigilar y garantizar el desenvolvimiento de aquellas relaciones. Tanto mejor desempeña su papel cuanto menor es su intromisión en el libre juego de las llamadas "leyes naturales" de la economía. El Estado es un "gendarme" necesario pero incómodo, y por tanto su presencia debe reducirse al mínimo indispensable.

El individuo es, pues, instrumento, protagonista y fin de este orden político económico. La colectividad lo sirve; el Estado lo protege.

Una forma extrema de individualismo es el anarquismo individualista que prescinde totalmente del Estado y apenas admite la "necesidad limitada" de la actividad colectiva para fines de carácter material, tales como la producción cooperativa de los artículos de subsistencia.

Dentro de las concepciones colectivistas, que incluyen las diversas formas del socialismo, el individuo deja de ser un fin en sí mismo; lo es, solamente, en la medida en que forma parte de la colectividad entera. La meta de la felicidad individual queda sustituida por la de la felicidad colectiva. Al hacerse evidente el hecho de que las prerrogativas individuales no siempre se quedan dentro de sus límites sino que, por su misma dinámica, tienden a invadir el campo de las prerrogativas ajenas y a servirse de ellas para beneficio propio, surge el nuevo concepto: quien sirve no es la colectividad al individuo, sino éste a aquélla. Y, al contribuir a la felicidad colectiva, el individuo se hace acreedor a la justa parte que, como a miembro integrante de la sociedad, le corresponde. A eso y nada más.

La propiedad privada pierde el carácter casi sagrado que le asignan las teorías individualistas. Y, de^ aquel plano de preeminencia en que había sido colocada, desciende bruscamente al banquillo del acusado. No solamente los socialistas marxistas, sino aun los utopistas, le atribuyen la mayor parte de los males que engendró la sociedad individualista.

La única propiedad respetable, por consiguiente, es la que cumple una "función social". La propiedad de las fuentes de riqueza (o instrumentos de producción) debe transferirse a la colectividad, de manera que la riqueza producida pase a ser colectiva en vez dé individual.

Cada una de estas teorías socialistas asigna un papel diferente al Estado. De acuerdo con unas el Estado fue un simple cómplice del la acumulación de privilegios en un sector minoritario de la sociedad; puede redimirse si pasa a servir temporalmente los intereses de la mayoría, con el nombre de dictadura del proletariado, para morir después, cuando su presencia sea innecesaria. Otras (socialismo de Estado), propugnan la existencia permanente del Estado, a condición de que cumpla funciones activa y directamente reguladoras del orden, no sólo jurídico y político de la sociedad, sino también —y principalmente— del económico. Si es necesario, debe competir con el individuo en este campo para mantener el equilibrio colectivo.

•Ha desaparecido el individuo como héroe del drama social, y también desaparecen los grupos o conjuntos de individuos que, por razón

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (10 Kb)  
Leer 6 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com