Fisonomía de la desigualdad de género y sus desafíos constantes
day7Ensayo27 de Junio de 2021
7.275 Palabras (30 Páginas)129 Visitas
Fisonomía de la desigualdad de género y sus desafíos constantes.
xxxxxxxxxxxxxxxxxxx
Facultad de xxxxxxxxxxxxxx- xxxxxxx 2018
Metodología I
xxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxxx
Universidad de xxxxxxxxxxxxxxx
06 de Marzo de 2021
- Contenido
1 Resumen 3
2 Introducción 4
3 Revisión bibliográfica 6
4 Antecedentes históricos y el ámbito laboral 7
4.1 La equidad de género en las primeras sociedades prehistóricas 7
4.2 Los roles de género de las mujeres en la Edad Media (siglos V a XV) 9
4.3 Edad Contemporánea (desde finales del siglo XVIII hasta el presente) 11
4.4 Ámbito Laboral 13
5 Feminismo 17
6 El concepto real de la desigualdad de género 20
7 Conclusión 21
8 Bibliografía 22
1 Resumen
Se analiza la constante brecha que existe entre hombres y mujeres que ha trascendido décadas y décadas, esta rivalidad innecesaria por la igualdad de derechos lleva consigo mucha aflicción para ambas partes, sin embargo las amenazas son mayores para las mujeres; en un inicio ni siquiera eran tratadas como seres humanos y a pesar de que la humanidad ha evolucionado, aún se puede observar diversas contrariedades cuando hablamos de este tema en específico. Muchos piensan que la desigualdad de género ha disminuido en comparación a otros años, y aunque esto es verdad, aún existen ideas arcaicas que afectan el diario vivir de la misma sociedad, incluyendo pruebas que son difíciles de tolerar. Es de conocimiento público que el patriarcado prevalece e impone normas sociales que son un poco déspotas y arbitrarias, aun así, desde finales del siglo XVIII surgieron movimientos sociales que empezaron a exigir los derechos que, desde un inicio debieron poseer tanto mujeres como hombres, por lo que, este tema aún genera controversias al momento de intentar ser justos con ambas partes.
Objetivo específico:
- Comprender y establecer los retos y limitaciones que la misma sociedad impone ante los diferentes tipos de género.
Objetivos generales:
- Contrastar la falta de humanidad con la que se trató a las mujeres desde la antigüedad hasta la actualidad.
- Discutir el concepto de desigualdad de género.
- Discutir la ausencia de la mujer en el ámbito político y económico.
- La extrapolación de movimientos sociales que surgen en defensa de la desigualdad de género.
- Ilustrar la carencia de la intervención del hombre
Palabras clave: Desigualdad de género, patriarcado, feminismo, matriarcado, económico, político.
2 Introducción
La desigualdad de género es el fenómeno que surge cuando un individuo o grupo determinado tienen más privilegios que otros y desprecia los derechos de los mismos a razón de su género.
Desde tiempos antiguos muchas sociedades implantaron una dominación física, sexual y social que certificaba el control de la mujer por parte de los hombres. Se empieza a interponer un principio dogmático que suponía la debilidad física e intrínseca de las mujeres y del correspondiente papel protector y proveedor de los hombres, quienes poseen el atributo natural del poder, la fuerza y la agresividad. (Pintos, 2007, p. 9).
A este predominio del hombre sobre la mujer se lo denominó patriarcado. Fue Joan Scott (1986);
En el artículo “El género, una categoría útil para el análisis histórico”, quien teorizo este concepto, haciendo de el algo más que una moda académica y editorial, es decir, estableciendo una categoría de análisis histórico.
Para Scott, el género es un tema que habla del poder que tiene determinado grupo de personas sobre otras en base al tipo de género que posea, en este caso es el patriarcado quien tuvo poder desde los inicios de la historia de la humanidad. Se concibe entonces un conjunto de características propias de las mujeres: casta, prudente, trabajadora, honrada, callada, obediente, hermosa y sorprendentemente, culta. A los hombres de esta época les gustaban las mujeres de piel clara, que no se han ennegrecido trabajando al sol, de cabellos rubios y rizados, limpios, cuidados y olorosos. (Duarte Cruz, J.M, García Horta, & J.B., 2016). La francesa Simonne de Beauvoir (1949) había ya expresado que: “no se nacía mujer, sino que se convertía en ello”. (p.5.).
De esta manera advirtió que el sexo está más ligado a la esfera biológica, a aquello que se trae al nacer, y que la noción de género tiene más bien un carácter sociocultural, que es construida dentro de la sociedad en particular donde se desenvuelve el individuo, y es aquí donde se vuelve o no efectiva, intentando regular el orden de las cosas y el comportamiento de las personas. (Álvarez, 2007). Según Natalie Zemon Davis (1976):
Redefinir sus objetivos en el sentido de “descubrir las variaciones de los papeles y significados de los roles sexuales en diferentes sociedades y periodos, comprender lo que representaban y cómo funcionaban para mantener el orden social o promover su cambio”.
Cuando el tema a tratar es la desigualdad de género, existe mayor concentración en el papel de la mujer debido a que fue la más afectada de ambos géneros, aun así, lo primero que se piensa cuando hacemos referencia al tema de la desigualdad de género, es el maltrato o violencia en contra de la mujer, pero el hombre también es víctima de este fenómeno. La elaboración de este doble concepto permitió, por un lado, mirar las relaciones sociales opresivas de otra manera, no colocando a las mujeres en la posición de víctimas y a los hombres en la de opresores, sino buscando para cada contexto cronológico, geográfico y cultural las posiciones relativas de cada grupo en la intersección del genero con la clase, la raza, etc.; además, hizo posible no solo seguir estudiando a las mujeres como seres sexuados, condicionados por las expectativas que la sociedad tiene en relación a lo que es apropiado a su sexo, sino también empezar a hacer lo mismo en relación a los hombres. (Seabra, 2009).
Existen muchas pruebas de que la mujer fue muy maltratada y aún lo sigue siendo en la actualidad, sin embargo, el hombre también es obligado a actuar y ser de una determinada forma; deben ser fuertes, dominantes, autosuficientes, crecimiento de pelo en el rostro (barba), mayor volumen corporal, más altos que la mujer, no deben ser emocionales ni mostrar sus debilidades, es obligación tener una voz grave, de lo contrario será objeto de burlas, tienen que ser competitivos, mostrar habilidades en los deportes, todo esto solo por la forma en que su cuerpo está hecho, ¡qué desgastante!, ambos géneros han sido maltratados y heridos solo por estereotipos arcaicos que siguen presentes en varias comunidades de distintos países.
Avanzar por un camino de mayor igualdad no es solo un imperativo ético en una región con brechas sociales que se expresan en diversos ámbitos; es también condición necesaria para acelerar el crecimiento de la productividad, internalizar y difundir la revolución digital, transitar hacia la sostenibilidad ambiental y proveer un marco institucional que permita actuar en un mundo en el que se conjugan grandes desequilibrios con enormes posibilidades. (CEPAL, 2018).
Durante la lucha por la igualdad de géneros surgió el movimiento feminista en el siglo XIX. “El feminismo es el conjunto de creencias e ideas que pertenecen al amplio movimiento social y político que busca alcanzar una mayor igualdad para las mujeres”. (Fiss Owen, 1992). “Este movimiento se fue gestando a partir de un proceso de reflexión en torno a la resignificación de la idea ilustrada de la igualdad”. (Flores, 2004). Las feministas no pretendían que la mujer fuera lo contrario al hombre; buscaban ser un otro verdadero, el reconocimiento de su particularidad como género y no solo como opuesto a masculino.
...