ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

PSICOPEDAGOGIA


Enviado por   •  8 de Diciembre de 2013  •  564 Palabras (3 Páginas)  •  238 Visitas

Página 1 de 3

Memorare

Madre

Rosa Acuérdate, oh misericordiosísima Virgen de Guadalupe, que ninguno de los que han acudido a tu protección, implorando tu asistencia y reclamando tu socorro ha sido abandonado por tí. Animado con esta confianza a tí acudo, Oh Virgen Madre! y aunque gimiendo bajo el peso de mis pecados, me atrevo a comparecer ante tu presencia soberana. No deseches Oh Madre de Dios! mis humildes súplicas, antes bien inclina a ellas tus oídos y dignate atenderlas favorablemente. Amén.

Cinco Ave Marías...in gratitude por las cuatro apariciones a Juan Diego y una a Juan Bernardino.

Oración

Madre

Rose Oh Virgen Inmaculada! Escucha la oración que te dirigimos y preséntala a tu Hijo Jesús.

Da la paz, la justicia y la prosperidad a nuestro pueblo. Queremos ser totalmente tuyos y fieles siempre a Jesucristo en su Iglesia.

Virgen de Guadalupe, bendice a nuestras familias. Compadécete de nosotros y guíanos siempre a Jesús. Y así, libres de todo mal, podremos llevar a los demás la alegría y la paz que sólo pueden venir de tu Hijo Jesucristo. Amén.

Un Padre Nuestro, Ave María y Gloria...en agradecimiento por el milagroso Retrato, milagro y continuo testimonio.

Oración

Madre

Rose Oh Purísima Virgen de Guadalupe alcánzame de tu Divino Hijo el perdón de mis pecados, bendición para mi trabajo, remedio a mis enfermedades y necesidades y todo lo que tu creas conveniente pedir para mi y mi familia.

Oh Santa Madre de Dios! no desprecies las suplicas que te dirigimos en nuestras necesidades, antes líbranos de todos los peligros.

Oh Virgen llena de gloria y bendición! Por Cristo Nuestro Señor, Amén.

Un Padre Nuestro, Ave María y Gloria...en agradecimiento por el milagroso Retrato, milagro y continuo testimonio.

Oración

Madre

Rose Santa María de Guadalupe, Mística Rosa, intercede por la Iglesia, protege al Soberano Pontífice, oye a todos los que te invocan en sus necesidades.

Así como pudiste aparecer en el Tepeyac y decirnos: "Soy la siempre Virgen María, Madre del verdadero Dios", alcánzanos de tu Divino Hijo la conservación de la Fe. Tu eres nuestra dulce esperanza en las amarguras de esta vida. Danos un amor ardiente y

...

Descargar como (para miembros actualizados)  txt (3.5 Kb)  
Leer 2 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com