Para empezar tenemos que saber cómo está formada una cerradura. Está formada por una pieza cilíndrica de metal con forma de tambor, que en su interior tiene dos hileras de pines.

DESCRIBIR-EXPLICAR

Las cerraduras.

Para empezar tenemos que saber cómo está formada una cerradura. Está formada por una pieza cilíndrica de metal con forma de tambor, que en su interior tiene dos hileras de pines. Al momento de introducir una llave adecuada  por la entrada del cilindro los dientes de en forma de sierra empujan hacia arriba los pines que están en el interior del cilindro.  A su vez estos pines también mueven otros pines, llamados pines superiores, alineándolos con en la parte superior interna del tambor, así se liberan y pueden girar. Cuando  el cilindro gira, la parte trasera del este acciona un mecanismo y lo obliga a entrar en el cuerpo de la cerradura, así podemos abrir la puerta.

El miedo.

Todos sentimos miedo sin importar que. Casi siempre ocultamos nuestros miedos, porque pensamos que  los demás se burlaran de a que le tememos. En pocas palabras tenemos miedo de tener miedo. Muchas veces sucede sin siquiera percatarnos de ello, el cuerpo se encarga de reflejar lo que sentimos, al tener miedo sentimos como el corazón se acelerar, las manos comienzan a sudarnos e incluso se tensan nuestros músculos. La razón de esto es porque el cuerpo se está preparando para una situación en la que pueda ser que peligren nuestras vidas.

Miedos hay muchos  muchas veces pueden ser pequeños pero también hay veces que el miedo comienza a crecer. Cuando esto sucede es recomendable hablar con alguien respecto a eso, alguien en quien podamos confiar. El hablar de los problemas y miedos ayuda, puede que no desaparezcan por completo pero externarlos hace que liberemos un peso de nosotros. Sin embargo, tener miedo no está mal si no fuera por el miedo probablemente nuestra vida peligraría en todo momento. Sin el miedo a ser atropellados es casi seguro que cruzaríamos las calles sin siquiera voltear a ver si el semáforo está en rojo.

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