Principios Éticos del Administrador

Principios Éticos del Administrador

-Ejercer la profesión con eficiencia, imparcialidad, diligencia, transparencia, honradez y competencia, teniendo como principal objetivo la correcta administración de los bienes confiados a su cargo y la prestación de un servicio directo a las personas, mejorando la calidad de vida y el bienestar de los integrantes de la comunidad consorcial.

-Cumplir y hacer cumplir la legislación y reglamentaciones vigentes.

-Actualizar y perfeccionar constantemente sus conocimientos en función de los servicios que brinda.

-Tomar las decisiones de compras y contrataciones basándose en el mejor resultado de costo-beneficio para el consorcio teniendo en cuenta: precio, calidad, marca, garantía y respaldo profesional.

-Informar y comunicar de forma clara, sencilla y veraz a sus administrados respecto de la situación y desenvolvimiento de la comunidad consorcial que atiende y especialmente cuando se prevén circunstancias adversas que pueden afectar los bienes confiados a su custodia.

-Conducirse siempre con plena conciencia de la solidaridad profesional, de modo tal que se promueva la cooperación y las buenas relaciones entre todos los administradores.

-Comunicar a tiempo y por escrito a sus administrados la existencia de impedimentos o incompatibilidades para el desempeño del cargo.

-Percibir honorarios y aranceles razonables por sus servicios, que representen una justa remuneración por su gestión, responsabilidad y jerarquía profesional.

-Tratar a sus colegas, clientes, proveedores y personal con equidad, dignidad y respeto, exigiendo reciprocidad de manera que se promueva el bienestar y mejore la calidad de vida.

La Honestidad: es fundamental que un profesional ligado a la Administración de Empresas sea honesto, virtud que permitirá a sus principales (patrones) descansar en él recursos económicos, sean estos para administrarlos o custodiarlos.

EJEMPLOS

Un administrador honesto evitará cualquier intento de soborno del que pudiésemos llegar a ser objeto.

Violación de este principio. un administrador acepta el soborno del que pudiese llegar a ser objeto.

El Cumplimiento de las leyes del país en el cual uno se desempeña: es evidente que toda organización debe funcionar al amparo de la ley y no fuera de esta. Es importante que un administrador de empresas comprenda este principio fundamental de tal manera que lleve a su organización por un camino correcto y que la asesore adecuadamente.

Un buen administrador de empresas conocerá de los impuestos que afectan a sus clientes y los asesorará de manera adecuada.

Violación de este principio. Un administrador de empresas tratara de evitar el pago de los impuestos para su beneficio propio

El mantener alejado el conflicto de interés: este valor es de gran importancia en el desempeño de nuestras funciones y tiene relación con el rechazar la tentación de mezclar los intereses de la empresa a la cual representamos y los nuestros al punto que pudieran dañar los intereses de nuestros clientes.

En el caso de administradores de empresas que se desempeñan como corredores de bolsa y que manejan información clasificada, la tentación de usar dicha información en beneficio propio es grande y los resultados son ampliamente conocidos

Violación de este principio. en el caso de administradores de empresas que se desempeñan como corredores de bolsa y que manejan información clasificada, usara dicha información para su beneficio propio.

...