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Santo Tomas De Aquino


Enviado por   •  8 de Noviembre de 2012  •  1.657 Palabras (7 Páginas)  •  413 Visitas

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Santo Tomás de Aquino (1225 - 1274)

Biografía.

Santo Tomás de Aquino nació en el castillo de Roccasecca, cerca de Aquino, en el año 1225, en el seno de una numerosa y noble familia italiana. Su padre, Landolfo, descendiente a su vez de los condes de Aquino, estaba emparentado con el emperador Federico II. Su madre, Teodora, era hija de los condes de Taete y Chieti. Recibió Tomás su primera educación, a partir de los cinco años, en la abadía de Montecasino, de la que era abad su tío, permaneciendo en el monasterio hasta 1239, cuando el emperador Federico II decretó la expulsión de los monjes. Allí realizó los estudios ordinarios de gramática, latín, música, moral y religión.

A finales de 1239 se dirigió a la universidad de Nápoles para continuar sus estudios, permaneciendo en dicha ciudad hasta 1244, año en que, sintiéndose atraído por la vida de los frailes dominicos que había conocido en un convento de Nápoles, ingresó en la orden como novicio.

Se dirigió posteriormente a París, probablemente en el verano de 1245. En París permaneció hasta 1248, como estudiante, ganándose rápidamente la confianza de San Alberto Magno quien se sintió atraído por las grandes posibilidades intelectuales de su discípulo.

En 1248 se dirigió a Colonia, con San Alberto, quien iba a fundar una casa de estudios para la orden. En Colonia permaneció con él hasta 1252, regresando a París para continuar sus estudios, recibiendo su licenciatura (licencia para enseñar en la Facultad de Teología) en 1256, siendo nombrado Magister ese mismo año, ocupando su cátedra hasta el 1259.

En 1259 se trasladó a Italia, donde permaneció hasta 1268, con el encargo de enseñar teología en la Corte pontificia . A lo largo de estos años residió en varias ciudades italianas, como Anagni, Orvieto, Roma y Viterbo, siendo invitado a dar conferencias en las universidades de Nápoles y Bolonia. En esta época conoce, entre otros personajes ilustres, a Guillermo de Moerbeke, el famoso traductor de las obras de Aristóteles, quien puso a su disposición varias de sus traducciones, entre ellas algunas que se encontraba prohibidas en la época (De Anima, De Sensu et Sensato y De Memoria et Reminiscentia) y que Sto. Tomás comentará, junto con otras obras de Aristóteles como la Física y la Metafísica.

En 1268 regresa a París, impartiendo su magisterio hasta 1272, en medio de numerosas polémicas provocadas tanto por los ataques contra y entre las órdenes religiosas, como por las controversias suscitadas por los averroistas latinos, quienes, encabezados por Siger de Brabante, habían copado la facultad de Artes (filosofía) modificando sustancialmente las enseñanzas aristotélicas que San Alberto y el mismo Sto. Tomás habían anteriormente introducido en dicho facultad.

Luego de una polémica actividad regresa a Nápoles el año 1272, con el encargo de establecer una casa de estudios (studium generale), donde abandona totalmente su actividad docente y de autor, encontrándose frecuentemente arrebatado por experiencias místicas que le absorben por completo. Permanecerá allí hasta 1274, muriendo en el transcurso del viaje iniciado ese año para dirigirse de Nápoles a Lyon, donde iba a celebrarse un concilio convocado por el papa Gregorio X.

Situación social de la época.

Santo Tomás pertenece a la época histórica que se conoce como Baja Edad Media (S.XI – S.XIV). En el siglo XIII europeo -como en todo el medievo---, la influencia de lo religioso en los elementos políticos y socio-culturales con¬tinúa siendo una constante. La sociedad sigue inmersa en la mentalidad teocén¬trica.

A lo largo del siglo perviven fenómenos político-religiosos iniciados con anterioridad. Tal es el caso de las cruzadas -de la cuarta en adelante-, que si¬guen aportando, entre otros elementos, savia oriental a la civilización europea. También hay que tener en cuenta la continuidad de la Reconquista española, en tanto que facilitaba el contacto con la cultura musulmana y lo que ella su¬ponía -no se olvide la importancia del averroísmo en esta época-.

En el campo político, comenzaron a consolidarse las grandes mo¬narquías europeas, como las de Castilla, Aragón o Inglaterra, destacando entre todas ellas, por su poder, el reino de Fran¬cia. También se planteó la idea de una “cristiandad univer¬sal”, concepto que dio lugar a un grave enfrentamiento entre dos grandes poderes, el del Emperador y el del Papa, cuyos ámbitos de actuación no estaban claramente delimitados. El conflicto estalla entre Enrique IV (1050-1106), emperador de Alemania, y el Papa Gregorio VII, con el deseo de ambos de que se reconociera su supremacía dentro de la cristiandad. El resultado de esta pugna es el debilitamiento del cargo de Emperador y la reducción de la influencia espiritual de los papas. Tras la muerte de Federico II (1250) el sueño de la reconstrucción de un Imperio universal se tornará algo utópico y el poder de papado se ve afianzado. Durante buena parte del S.XIV el Papado se trasladó a Avignon produciéndose el cisma de Occidente, en donde la Iglesia tuvo dos papas a la vez, uno en Roma y otro en Avignon.

Frente a la caída del Imperio y del Papado, las monarquías hereditarias cobraron auge, dando lugar, a la larga, a la idea de nación que a la postre

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