Independencia Hispano-americana

Independencia Hispano-americana

Las causas criticadas por Ferreiro son:

Por un lado un separatismo, ya que antes de 1810 los americanos no tenían intenciones de independizarse. Si lo hubieran querido así, podrían haberlo logrado: habían solo 300.000 españoles frente a 15 o 16 millones de americanos aproximadamente y a su vez, los conquistadores no tenían fuerzas físicas aplicadas en dichas colonias. Los conflictos que se daban eran internos, no buscaban separarse completamente de sus colonizadores, es decir, querían cierta autonomía, pero apoyaban a la corona española. Esto demuestra que no existía un sentimiento nacionalista lo suficientemente grande como para lograr un deseo de separarse, pero sí podemos encontrar un regionalismo: zonas como el río de la Plata o el alto Perú querían sentirse como una región autónoma sin dejar de ser parte de su potencia colonizadora.

A su vez muchos historiadores hablan sobre el quietismo colonial, en el cual América permanecía en relativa paz hasta la época de las revoluciones, con pequeños levantamientos cerca de esa fecha. Ferreiro desmiente esa afirmación y menciona que siempre hubo problemas internos.

El liberalismo fue un causante a nivel político: la revolución francesa impulsó el esparcimiento de las ideas liberales (igualdad, libertad) y anti monarquistas en América. Sin embargo, los americanos no lograron simpatizar con las formas planteadas de llevar a cabo la revolución y cumplir con sus ideales. Por su parte, la norteamericana aunque movilizó por ejemplo a Buenos Aires, no fue un factor determinante ya que la hispano-americana fue medio siglo después y no tenía un objetivo separatista. También se habla de la desigualdad entre criollos y españoles para la previsión de cargos públicos como una fuente de causa; Ferreiro plantea que esta desigualdad no tenía que ver con el sistema de gobierno sino que fue por razones de formación. Algunos americanos creían que el monopolio comercial con España no los favorecía ya que las trabas comerciales no permitían el ingreso de productos ingleses baratos, pero a otros dichas trabas los ayudaban a comercializar sus productos manufacturados. Al no aplicar en todas las regiones no fue una causa esencial. Más allá de estos hechos, el liberalismo como causa puede ser cuestionable ya que no había nada distinto en América y en España. De esta forma por sí mismo no puede influenciar la independencia.

 Las causas que argumenta Ferreiro son:

Una especie de “racismo”, ya que existían distintas razas (blancos, negros, indios, entre muchas más sub-razas) y los blancos buscaban alejar a las demás. También se daban situaciones en las que los criollos se oponían a que personas de filiación dudosa tuvieran determinados cargos, generando separación.

Por su parte los intereses comerciales de las distintas regiones es otro factor a ser considerado que necesitaba soluciones. Por un lado, un comercio liberal, y por el otro, un régimen de trabas. Sumado a esto, se hicieron notar rivalidades que crecieron con el tiempo, con respecto a los puertos que dependían de otros debido a la mala repartición arbitraria de límites.

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