Las Venas Abiertas De América Latina Parte 1

Introducción

En la actualidad vivimos en un mundo de contrastes, de realidades distintas que podemos ubicar a lo largo de una línea del tiempo. El desarrollo imperialista del sistema capitalista que comanda Estados Unidos, impulsado por la gracia de la civilización británica siglos atrás, marca la pauta y el camino, la meta y el sueño, de todos los pueblos ajenos a esta realidad que podemos encontrar en tiempo real. Cercano a ellos existen varios pueblos en la lejana Asia, que han logrado, en mayor o menor medida, alcanzar el ritmo vertiginoso de la época, Corea del Sur, Hong Kong, Singapur, Japón y hasta China podríamos decir que supieron actuar de manera inteligente para ocupar un lugar cercano al desarrollo económico estadounidense que hoy marca en la imaginaria línea del tiempo, el año 2012. El África, que un bosquejo vago y poco analítico da una idea de que sencillamente ahí el tiempo no transcurre, son los mismo paisaje, los del inicio del siglo pasado, a los de hace dos siglos con los de hoy. La misma pintura estacionada, estancada en la parte más alejada de la realidad que gobierna al mundo. La misma imagen, con los mismos bosque (bueno al cabo de siglos de explotación mucho menos), la mimas sabana, la misma fauna, la misma flora, los mismos problemas. La descremación, la explotación, el trabajo forzado mal remunerado que raya con la esclavitud, el hambre y la muerte de miles y millones de seres humanos en esta olvidada pero vasta región del mundo. La América divida en dos, en norte y sur, en desarrollados y en vías de desarrollo, en ricos y pobres, en amos y sirvientes, en Norteamérica y Latino América. Es el ejemplo perfecto para estampar la idea que trato de transmitir, la existencia de tiempos y realidades diferentes en un mismo plano. El espacio y el tiempo no conocen la posibilidad de la existencia de dos tiempos distintos en diferentes espacios. Mientras en Norteamérica la opulencia del sistema capitalista le marca al mundo vivir en el año 2012, la América Latina quedó atrapada en siglo XIX, en las luchas de clases, en el abuso de las minorías, en el hambre de las mayorías, en la desigualdad social y por ende en la guerras, guerrillas y revoluciones que son, tan solo un débil grito de la desesperación de la realidad de la América en la que vivimos en pleno siglo XXI.

Las Venas Abiertas de América Latina

Parte 1

La pobreza del hombre como resultado de la riqueza de la tierra fiebre del oro.

La repercusión de la mano invisible en América, marco históricamente la región aun cuando Adam Smith ni la había imaginado. La famosa premisa del capitalismo, la división del trabajo, tan solo marco diferencias irreconciliables con el paso de los años entre los pueblos conquistados y los conquistadores. Recreó un juego donde existen pocos ganadores y muchos perdedores. América Latina ha dado y concedido no solo sus recurso sino hasta su vida para que los hoy países de primer mundo sean precisamente eso, primer mundo. El paso del desarrollo de otro, tan solo dejo pobreza en nosotros. Se han pasado medio siglo diciendo que a pesar de su explotación, la culpa de subdesarrollo es nuestra, por nuestra gente, porque pobres producen pobres y más pobres. Cuando en realidad se encargaron de despoblar las islas del Caribe y las regiones de Centroamérica. Y sí ellos, los amos del capital y el desarrollo, saben y conocen el problema que tenemos, América tiene un problema: son los Latinoamericanos.

Fiebre del oro, fiebre de la plata: El signo de la Cruz en las empuñaduras de las espadas

1942, año que cambiaria el mundo y lo moldearía a la visión que tenemos de él en la actualidad. Colon llegó a América, confundido por la intención de llegar a la india. En España los musulmanes eran tan solo un mal recuerdo, ochocientos años y una bancarrota era el panorama de la casa real española después de haber recuperado su reino. La guerra santa y la militarización del reino de castilla son sucesos que explican el descubrimiento de América y de cómo les pertenecía a los españoles por decreto divino según el Papa Alejandro VI.

La América habitada por “indios” sufrió de la esclavitud, bendita y permitida por la iglesia como castigo a todo aquel que no se convirtiera a la religión católica. Y aquel que se convertía era al fin de cuentas un esclavo católico, puesto la libertad que pregonaba la iglesia era de carácter espiritual. Libre de espíritu, pero obligado al trabajo mortal. Durante el siglo XVI los productos agrícolas eran más valorados que la misma condición humana de los indios. La plata y el oro sirvieron para sacar a Europa de su letargo y ponerlos a las puertas del capitalismo. España y Portugal contribuyeron en gran medida a la construcción del mundo en el que hoy vivimos a través de la fe cristiana y la explotación de los recursos naturales.

El oro, la maldición de nuestros pueblos y el alimento de la avaricia de los visitantes, desde su llegada, deslumbrados por las riquezas y la abundancia del metal que ostentaban los nativos, buscaron y desgarraron de la tierra el precioso metal. Aprovechados de la mitología americana que los creían dioses. La plata, tan abundante en muchas zonas del continente también fue maldición de sus pueblos. La explotación de los metales de América Latina en gran medida explica el subdesarrollo de la región impactada por el mazo de los colonizadores, pero también fue la maldición de aquellos que la extrajeron y comercializaron.

España trafico metales a lo largo de su reinado en América, tanto que la opulencia de los españoles y de su corona alcanzó niveles de despilfarro. La plata llegaba a España pero se guardaba en las bóvedas de todos los acreedores del pueblo y reino español. La lucha por el mercado español entre los europeos permitió que el oro y la plata extraída desarrollaran sus estados y países. España fue tan solo el puente entre América y Europa.

La exagerada explotación alentó la creación de grandes urbes mineras a lo largo de la colonia, urbes que así como nacieron de la noche a la mañana desaparecían, para quedar en el olvido del mundo, aun cuando el sistema estaba en funcionamiento gracias a todo lo que se extrajo de sus tierras. El esplendor de lugares como Potosí o Zacatecas durante los siglos XVI y XVII contrasta de gran manera con la pobreza y hambre que recorren sus calles hoy en día. La mayoría de las regiones con gran desarrollo en la colonia son las más subdesarrolladas del mundo. La discriminación de la sociedad indígena se hizo presente, su explotación y su incorporación a las tareas más duras del sistema mercantilista

...