Desigualdad social como impedimento para la construcción de cultura de paz

Desigualdad social como impedimento para la construcción de cultura de paz.

Si más o menos tenemos nociones o vagos conocimientos de la historia colombiana después de la segunda mitad del siglo XX, vemos que se tuvo como influencia para la conformación de los grupos guerrilleros entre otras la revolución cubana que tuvo fin de la dictadura de Batista finalizando la década de los años 50, que impulsó que surgieran grupos como el ELN, las FARC y el EPL grupos que en su génesis parecían tener intenciones nobles que posteriormente se fueron torciendo, ya que históricamente los gobiernos de turno siempre han defendido los intereses de las familias y grupos económicos más poderosos del país abriendo cada vez más la brecha de desigualdad haciéndolos mucho más ricos concediéndoles cantidades absurdas de territorio, beneficios tributarios, entre otros; estas cosas y otras más han sido la manzana de la discordia que hasta el día de hoy sigue siendo un problema que junto con el surgimiento del narcotráfico ha agravado significativamente la situación. Específicamente el problema se centra en el mal manejo de todos los gobiernos que ha habido en toda la historia desde la independencia de Colombia como tal hasta los últimos gobiernos que en su total mayoría fueron manejados por las elites patrocinados totalmente por las ya mencionadas familias más adineradas y son muy pocos los que realmente se preocuparon por fomentar el desarrollo de la sociedad como tal en todas las regiones pues siempre ha hecho falta más inversión en educación, en el agro, salud, etc. Lo que si se ha evidenciado es que ha habido un brutal crecimiento en la desigualdad en cuanto a la distribución de las tierras y tras varias promesas de reforma agraria, no ha habido ninguna que quiera resolver a fondo, según la ONG OXFAM El 1% de la población en Colombia es dueña del 81% del territorio, convirtiéndose en el país más desigual de Latinoamérica y uno de los más desiguales del mundo.

El actual gobierno del presidente Gustavo Petro, en una de sus promesas de campaña se comprometió en realizar una verdadera reforma agraria que durante décadas ha sido dilatada, o mal ejecutada. El presidente anunció la adjudicación de unas 700.000 hectáreas de tierra a 12.000 campesinos y firmó un acuerdo con varios ganaderos para comprar y entregar tierras a campesinos, esperaremos como avanza esta estrategia para ir cerrando la brecha de desigualdad e ir avanzando y construyendo paz, ya que estructuralmente el Estado como garante debe emplear estrategias macro a través de sus instituciones y colaboradores para crear esa atmosfera de paz que por tantas décadas la hemos pedido los colombianos, por ejemplo, se debe hacer un esfuerzo a nivel educativo porque actualmente es complejo acceder a la educación superior si no se cuentan con ingresos económicos,

...