Educación Humanística En La Venezuela De Hoy En día

El modelo ideal de la educación humanística en Venezuela sería aquel que fomente la búsqueda de la dignificación de la calidad de vida de los venezolanos, un sistema donde la educación impartida por las instituciones contribuya a la construcción de un país más sensato, basado en valores de igualdad de oportunidades, libertad y responsabilidad social que conduzca a la constitución de una sociedad con ciudadanos críticos y sensibles.

Desde hace un tiempo los venezolanos han olvidado el valor que tienen las humanidades en la sociedad, dejando de lado aquellos elementos que los hace convivir dentro de la población, se han convertido en ciudadanos ajenos los unos a los otros, que solo aspiran el bienestar particular. Un motivo de este comportamiento se debe al desinterés que han tenido las instituciones educativas, tanto escuelas como universidades, de graduar personas con un amplio conocimiento general, con pensamiento libre y espíritu cívico y humano.

Un responsable de esta situación es el actual gobierno venezolano que intenta insertar un modelo educativo de masificación que desea vincular la educación, la familia y la comunidad, bajo conceptos de aprender, crear y participar, con el fin de crear una nueva ciudadanía; parece un sistema socializador y humanístico, sin embargo, este modelo carece de libertad, solo se encarga de transformar a los ciudadanos en personas sumisas ante un sistema que conduce a una decadencia social, producto del adoctrinamiento que enseña con prejuicios y manipulaciones. Este modelo no educa a las personas para pensar, solo para obedecer, por eso se ha visto un gran retraso en el desarrollo científico y tecnológico de este país, consecuencia de la formación limitada. Este sistema no busca reproducir pensadores que colaboren a construir un país mejor, sino de propagar fanáticos de una revolución.

Si el gobierno dejara de implementar este sistema donde los valores, la convivencia y el bienestar sean dogmaticos y estableciera un estilo socializador y humanístico real en la educación venezolana, en el que se incentive a la población a dejarse llevar por “el apetito de observar, leer, reflexionar, investigar, experimentar, criticar, hacer y aprender”, como escribió Gabriel Zaid en su artículo La Canasta Costosa, entonces se podrá observar una sociedad con pensamiento libre, tolerante y consiente, que este en la capacidad de discernir ante los procesos que lleven al país a un progreso económico y social.

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